informacion.es

El ayuntamiento de Benidorm ha aprobado hoy en comisión de gobierno autorizar a la unión temporal de empresa (UTE) Dragados-Rover Alcisa para continuar los trabajos de construcción del centro cultural durante los meses de julio y agosto.

Según un comunicado remitido por el consistorio, la petición de las empresas entró por registro municipal el pasado 1 de julio y de ese mismo día es la propuesta elevada a comisión por el concejal de Urbanismo, Jaime Llinares, según la documentación a la que ha tenido acceso Efe.

La UTE solicitaba continuar con los trabajos de estructura de hormigón durante los meses de julio y agosto con el objetivo "de finalizar la obra".

Las adjudicatarias han tenido que cursar esta petición puesto que la ordenanza municipal establece que las obras deben ser paralizadas durante los meses de verano a excepción de aquellos casos en que el ayuntamiento autorice lo contrario atendiendo al "interés general".

Esta autorización llega varias semanas después de la polémica surgida en torno a la ralentización de la construcción del centro cultural, que está financiada por la Sociedad Proyectos Temáticos de la Comunidad Valenciana (SPTCV).

Desde el ayuntamiento se ha venido sosteniendo que las obras estaban "paralizadas" o que, al menos, el ritmo de construcción no era "el adecuado" para una infraestructura de esta envergadura.

Por ello, se elaboró un comunicado, presentado el pasado 25 de junio, al que se han adherido más de 60 colectivos y asociaciones de Benidorm para reclamar al Consell "la reanudación de las obras".

El pasado 29 de junio fuentes de la Conselleria de Economía y Hacienda, de la que depende la SPTCV, afirmaron que las labores se estaban ejecutando a "un ritmo adecuado" y que las discrepancias económicas surgidas con la UTE "ya" estaban solucionadas.

Al día siguiente, el grupo municipal del PP remitió un dossier fotográfico en el que se constataba que se estaban instalando unas vigas en la fachada exterior del edificio y que, en consecuencia, los trabajos no estaban paralizados.

Desde el gobierno local se indicó entonces que esta "reanudación" de las obras era "un simulacro".

Este es el tercer año consecutivo en el que el ayuntamiento autoriza a la UTE a proseguir los trabajos durante la época estival.