El caso sucedido ayer en Gata de Gorgos no es el primero, por horas, vinculado con la violencia de género en la provincia durante el pasado fin de semana. Otro tenía lugar antes en Benidorm, en la noche del sábado, donde una mujer fue detenida por apuñalar presuntamente a su pareja sentimental.

La arrestada, de 40 años de edad y nacionalidad española, está acusada de un presunto delito de tentativa de homicidio tras apuñalar en el pecho a su compañero, un hombre de 27 años y de nacionalidad lituana, según informaron fuentes de la Policía Nacional.

Según las mismas fuentes, los hechos ocurrieron en torno a las 22.30 horas del sábado en el edificio Playmon, bloque F, ubicado en la avenida de Portugal, donde según declararon a este medio varios vecinos convivía la pareja, aunque sobre él pesaba una orden de alejamiento. Por este motivo, aunque oficialmente no han salido a la luz los motivos que originaron el suceso, todo apunta a que el desencadenante fuera sentimental, pues según dijeron los vecinos eran frecuentes las discusiones entre la pareja.

De hecho, según las primeras investigaciones, ambos se enzarzaron en una pelea en la que supuestamente la mujer agredió, con un cuchillo de cocina, a su compañero sentimental, hiriéndole en el pecho, donde el arma llegó a afectar al corazón.

Tras la incisión, el hombre, malherido, salió huyendo alcanzando por su propio pie el ascensor del edificio, logrando llegar hasta el rellano del portal, donde lo encontró poco después el portero de la finca, según relataron varios vecinos.

En aquel momento, el conserje del inmueble dio aviso a la Policía, que se personó en el lugar, calmando los alterados ánimos del vecindario.

También, según declararon los vecinos, se personó una primera ambulancia que no trasladó al herido, sino que "esperó a que llegara una segunda, del Samu, que sí tenía médico". Mientras éste atendía a la víctima, los agentes revisaron la vivienda de la mujer, que alegaba en su defensa que su compañero "se había lesionado a sí mismo", versión descartada desde el primer momento por el facultativo que asistió al agredido, según confirmaron fuentes policiales.

En la inspección del apartamento, los agentes encontraron el cuchillo de cocina, escondido detrás de una cortina, tras lo cual detuvieron a la mujer, identificada como J.C.R, acusada por un presunto delito de tentativa de homicio. Por su parte, el joven fue trasladado, en estado grave, a un centro hospitalario, fuera de la comarca, tras ser atendido en primera instancia por la dotación facultativa que acudió al lugar.

"Te tengo que matar"

Según los vecinos, la última reyerta de la pareja la protagonizaron hace exactamente una semana, en plena calle, durante la cual la mujer no cesó de gritarle "te tengo que matar", en presencia de todos los vecinos.