Más de 150 taxistas de Benidorm y de la comarca se concentraron ayer en la explanada de la estación de autobuses de la ciudad para mostrar su apoyo al conductor de Benidorm que fue agredido por un cliente la madrugada del pasado viernes en una gasolinera de la provincia de Murcia y para reclamar más medidas de protección para los trabajadores del sector del taxi. Poco antes del mediodía, los primeros taxistas se fueron congregando ante la puerta principal de la estación hasta tomar por completo la plaza, tras lo cual dedicaron unas palabras de apoyo y un sonoro aplauso a su compañero, A.G.A., de 40 años de edad y que no pudo asistir al homenaje porque aún se recupera de las heridas que le provocó su agresor tras asestarle dos puñaladas y un corte en el cuello.

El presidente de la asociación local de RadioTaxi, Juan Ramón Mancebo, manifestó que los conductores de taxi realizan "un trabajo en ocasiones muy peligroso y con pocos medios de seguridad". Por este motivo, en nombre de todo el colectivo, reclamó la "homologación de un modelo de coche único, con mamparas, sistema de localización por GPS, etcétera, que nos pueda proporcionar más protección a la hora de ejercer nuestro trabajo". Además de la petición de un coche homologado, Mancebo reclamó que las administraciones "tengan en cuenta al sector del taxi y aprueben subvenciones destinadas a mejorar la seguridad y las medidas de protección en los coches". Los cálculos que maneja la patronal del taxi en Benidorm apuntan a que instalar un sistema de GPS en los 232 vehículos que prestan servicio en la ciudad podría ascender a unos 600.000 euros, a lo que Mancebo agregó que "con una ayuda pública de un 10 o un 15%, podríamos hacer frente a esa inversión".