El catedrático de Análisis Geográfico Regional de la Universidad de Alicante, Jorge Olcina, recomendó ayer a los destinos turísticos que planifiquen su territorio "teniendo en cuenta el cambio climático" y agregó que esa consideración "han de protagonizarla las administraciones", en especial las locales porque, dijo, "aún tienen que dar el paso para adaptarse a esa realidad", algo que ya han hecho en cierta medidas las administraciones superiores.

Olcina ofreció una conferencia sobre el turismo y el cambio climático y su incidencia en la cuenca mediterránea. Tras "rebajar los mitos sobre las visiones catastrofistas" del cambio climático, aunque dejando claro que "será el problema más grave al que nos enfrentemos en las próximas décadas", Olcina expuso otras recomendaciones además de la de planificación del territorio. Así, afirmó que es necesario "huir de posturas catastrofistas, como las que dice que Benidorm se quedará sin playas dentro de 70 años porque, en el peor de los casos que se estudian, la subida del nivel del mar podría ser de unos 30 centímetros en 60 años. Pero ello no debe alejarnos de las posiciones prudentes". De igual forma también abogó por "no desperdiciar ninguna idea para seguir avanzando en el cambio climático y su percepción" y añadió la necesidad de "intentar sacar conclusiones".

Precisó, además, que podrían darse tres escenarios en el futuro; un mayor calentamiento, un calentamiento con un enfriamiento súbito posterior y un tercer escenario que se tradujese en un calentamiento global "menor de lo esperado".