La Asociación de Enfermos de Alzheimer de Crevillent estrena sede con centro de día

La empresa Cárnicas Ortolá dona las obras de adecuación y el equipamiento del local sito en la calle Alarico López Teruel

Un momento del acto de cesión de obras y equipamiento de Cárnicas Ortolá a la asociación Creviafa

Un momento del acto de cesión de obras y equipamiento de Cárnicas Ortolá a la asociación Creviafa / INFORMACIÓN

La Asociación de Familiares de Personas con Alzheimer y otras demencias de Crevillent (Creviafa) ya dispone de una sede propia, que utilizará como centro de día para realizar sus terapias a los enfermos. La empresa crevillentina Cárnicas Ortolá donaba a Creviafa -en un acto público celebrado ayer-, las obras de adecuación y el equipamiento y mobiliario necesarios para que inmediatamente pueda entrar en funcionamiento su nuevo servicio, situado en el número 5 de la calle Alarico López Teruel. Al evento asistían la alcaldesa de Crevillent, Lourdes Aznar, representantes de todos los partidos políticos de la Corporación, el director gerente del Departamento de Salud del Hospital del Vinalopó, Rafael Carrasco, y representantes de distintas asociaciones y entidades crevillentinas. Hasta ahora, la entidad estaba ubicada en el centro de mayores.

En el acto, los propietarios de la compañía, Enrique Ortolá y Rosa Gilabert, hicieron entrega formalmente de las llaves del local, en el que se han realizado obras con todas las instalaciones necesarias para que la asociación pueda desarrollar su labor de atención a los pacientes «de la forma más profesional, correcta y cómoda», expresaba el responsable de la empresa, que destapó una placa conmemorativa junto a la alcaldesa y la presidenta de Creviafa.

Momento previo al descubrimiento de la placa conmemorativa de la donación de Cárnicas Ortolá a Creviafa

Momento previo al descubrimiento de la placa conmemorativa de la donación de Cárnicas Ortolá a Creviafa / INFORMACIÓN

Enrique Ortolá daba las gracias a Creviafa por darle la oportunidad de colaborar en esta iniciativa y «porque realizáis una labor tremendamente necesaria. Ahora podréis llegar a más personas que necesitan de vuestro trabajo profesional y humano. Y en este objetivo, nuestra familia quería implicarse».

El empresario lanzaba un llamamiento: «Consideramos de vital importancia que la sociedad civil y las empresas de Crevillent nos involucremos para mejorar la atención y el cuidado de las personas que lo necesitan. Es nuestro deber y, en el caso concreto de la atención a personas con Alzheimer, sólo el primer paso».

Ortolá anunciaba que tras la apertura del centro de día, Creviafa inicia un nuevo proyecto: la consecución de la residencia para afectados por la enfermedad y otras demencias. «Y en este proyecto sí necesitamos la implicación directa de nuestras instituciones (Generalitat, Diputación y Ayuntamiento). Todos debemos implicarnos. Es nuestro deber. Y Crevillent lo necesita», concluía.

Agradecimientos

A continuación intervenía la presidenta de Creviafa, María del Carmen Asencio, que agredecía «profundamente la donación y el apoyo e implicación que la mercantil Cárnicas Ortolá ha brindado a la asociación, atendiendo todas las peticiones que les hemos realizado para poder brindar en nuestro nuevo centro de día la mejor atención a las personas afectadas y a sus familias. Esta es la primera piedra para seguir creciendo en un futuro».

Por su parte, la alcaldesa destacaba la «gran generosidad por parte de una empresa local, Carnicas Ortolá, que hoy cede el uso de unas instalaciones nuevas y equipadas para un colectivo que necesita de mucha ayuda. La cesión de instalaciones es un acto que no solo beneficia a los enfermos y sus familias, sino que también demuestra el verdadero espíritu de responsabilidad social empresarial».

Un momento de la visita al nuevo centro de día de Creviafa cuya adecuación ha sido financiada por Cárnicas Ortolá

Un momento de la visita al nuevo centro de día de Creviafa cuya adecuación ha sido financiada por Cárnicas Ortolá / INFORMACIÓN

Aznar apuntaba que «este gesto no solo proporciona un espacio físico para la atención y cuidado de quienes padecen Alzheimer, sino que también envía un mensaje poderoso sobre la importancia de la solidaridad y el apoyo mutuo dentro de nuestro pueblo. La financiación al 100% por parte de Carnicas Ortolá demuestra un compromiso genuino con el bienestar de quienes más lo necesitan».

«El Ayuntamiento de Crevillent se compromete a seguir trabajando incansablemente por las personas afectadas de Alzheimer y junto a la Asociación Creviafa, ser un faro de esperanza para aquellos que enfrentan los desafíos diarios asociados con esta enfermedad. Tenemos que seguir apoyando a quienes luchan contra el Alzheimer. Juntos, podemos crear un entorno compasivo y comprensivo que brinde apoyo a todas las personas afectadas por esta enfermedad», exponía la regidora, que concluía deseando «que este acto solidario de Enrique Ortolá inspire a seguir el ejemplo, brindando apoyo a iniciativas similares para quienes más lo necesitan. Felicitaciones a Carnicas Ortolá por este hermoso acto de generosidad y compromiso con Crevillent y enhorabuena Creviafa, que contáis con unas instalaciones en las que seguir trabajando por ayudar a los usuarios y familias. Juntos, podemos trabajar hacia un futuro en el que la prevención, el tratamiento y el cuidado compasivo estén al alcance de todos».

La instalación

La nueva sede de Creviafa tiene partía de un local totalmente diáfano, con una superficie de 226 metros cuadrados, en el que se han realizado las obras de adecuación necesarias y demandadas por la asociación Creviafa. Los trabajos han consistido en la compartimentación de los espacios para aprovechar al máximo su distribución, de acuerdo a las necesidades planteadas. Además, se ha dotado a la sede de todas las instalaciones necesarias para su uso, desde la instalación eléctrica, de fontanería o saneamiento, hasta la climatización, domótica, protección contra incendios o accesibilidad. También se ha dotado el centro con el mobiliario y la equipación solicitada por los responsables de la asociación.

El resultado es un centro acogedor, útil, funcional, práctico y completamente accesible, para que los pacientes puedan hacer uso de los servicios que presta Creviafa de la mejor de las maneras posible. También para que el personal que aquí desempeña su labor de atención pueda desarrollar su trabajo de una forma adecuada. El centro de día está compuesto por dos despachos, dos salas taller, una sala multifuncional y una zona de descanso y otra de gimnasio que se pueden unir. También hemos podido ver la recepción con sala de espera, la sala de personal, tres aseos de los que dos están completamente adaptados, y el patio interior.

En los extremos, Enrique Ortolá y Rosa Gilabert -dueños de Cárnicas Ortolá- y en el centro la presidenta de Creviafa y la alcaldesa

En los extremos, Enrique Ortolá y Rosa Gilabert -dueños de Cárnicas Ortolá- y en el centro la presidenta de Creviafa y la alcaldesa / INFORMACIÓN

Cárnicas Ortolá

La empresa Cárnicas Ortolá nace en Crevillent en 1990 y actualmente cuenta con 50 trabajadores. Con más de 5.000 metros cuadrados de naves en el polígono de Chapatet en Crevillent, la compañía es una de las más importantes de España en el sector. Dos cifras que así lo demuestran: cada día produce un millón de albóndigas y unas 700.000 hamburguesas. En Crevillent, Cárnicas Ortolá y la familia Ortolá-Gilabert son muy conocidos por sus generosas donaciones y colaboraciones con asociaciones y entidades festeras, sociales y culturales. Sus acciones más populares, precisamente apoyando las celebraciones patronales, están en el libro de los récord Guiness: la hamburguesa más grande del mundo y también la más larga.

La familia Ortolá-Gilabert colabora habitualmente con instituciones como Cáritas, Cruz Roja, la Asociación de Fiestas, el Crevillente Deportivo y otras organizaciones de ámbito cultural, festero, deportivo y social. Ahora, se ha hecho cargo de la obra y equipamiento de este centro de día.