Los vecinos de la zona norte de Gran Alacant se vieron afectados ayer por la fuga de una tubería de fibrocemento de la red de agua potable que atraviesa la avenida del Mediterráneo.

Esta situación provocó que los técnicos de Hidraqua tuvieran que cortar el suministro de la red durante todo el día, aunque finalmente los residentes de la urbanización Montemar y el sector CG5 pudieron disponer de un servicio mínimo de agua, ya que se conectó el servicio a las viviendas desde una red secundaria de las tuberías de la avenida de El Carabassí.

Para actuar en la zona, un equipo de operarios de Hidraqua realizó excavaciones a primera hora de la mañana para determinar el punto de las filtraciones, un trabajo que se dilató por unas horas, ya que el conducto dañado se hallaba a dos metros de profundidad, enterrado sobre dos capas de asfalto, la primera más externa sobre el arcén actual y la segunda a más profundidad que formaba la anterior curva de este tramo superior de la avenida, donde hace unos años se modificó la rasante por ser demasiado acentuada.

Una vez dieron con la rotura, fijaron el conducto perforado con una abrazadera y a última hora los técnicos hicieron mediciones para asegurar que se había solventado la fuga.

El tráfico se paralizó a primera hora de la mañana para preparar la maquinaria, pero minutos después se reabrió porque finalmente no fue necesario actuar sobre la capa de asfalto de las vías, aunque se hizo una perforación del arcén para encontrar la zona dañada.