La modificación de la ordenanza que el Ayuntamiento quiere llevar adelante en 2018 en lo que afecta al Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) se aplicaría sobre unas 23.000 viviendas del municipio alfombrero. Crevillent prepara una rebaja fiscal para 2018, según aseguró el alcalde, César Asencio. Los principales cambios serían la modificación de las ordenanzas fiscales del municipio en lo que toca al IBI y la tasa de recogida y eliminación de basura.

En concreto, se reducirá el tipo de gravamen a las fincas lo que supondrá una reducción del 5,5% del IBI para las construcciones de Crevillent en 2018. Esta reducción supondrá una entrada de 350.000 euros menos en las arcas del municipio, que se cubrirán con la previsión de ingresos de las viviendas no declaradas que ya están en proceso de regularización.

Esta iniciativa pasará por el pleno municipal, pero ya cuenta con el apoyo explícito del Partido Popular, Ciudadanos y de Compromís. No obstante, la Comisión de Hacienda debatirá los pormenores de esta rebaja.

En lo que respecta al IBI, después de la previsión de ingresos para esta ordenanza, según aportan desde el Ayuntamiento de Crevillent, han tenido en cuenta la aportación de las nuevas altas de viviendas que no estaban declaradas y que ahora han regularizado su situación tras la última revisión catastral. También se tienen en cuenta las fincas que han incrementado su valor, que calculan desde el Ejecutivo local, supondrá un aumento de 400.000 euros en ingresos, que se sumará a una recaudación global de más de 6,3 millones de euros.

Además, desde el Ejecutivo local aportan que quedará un importe restante de 50.000 euros que se aplicará a una nueva partida de ayudas sociales, que tiene como fin pagar el recibo del IBI a aquellas familias con dificultades económicas y que estén dentro del baremo que en el área municipal de Servicios Sociales se publicará mediante una convocatoria pública en 2018.

En cuanto a la rebaja de la tasa de recogida y eliminación de la basura, desde el Ejecutivo local aseguraron que, tras pactarlo con Cs, se decidió rebajar a los crevillentinos su recibo con el mismo porcentaje que bajó el nuevo contrato del servicio adjudicado a FCC. El nuevo importe de la tasa caerá en cada vivienda hasta los 82 euros. Una rebaja del 17,5% y 17 euros menos por hogar.

El alcalde de Crevillent, César Asencio, aseguró que «estamos satisfechos de haber podido ajustar esta rebaja fiscal de más de medio millón de euros y ello sin poner en riesgo el mantenimiento de los servicios municipales».