El Ayuntamiento de Santa Pola ha puesto en el Parque Natural de El Hondo el punto de mira, para tratar de encontrar el origen de los vertidos irregulares detectados en el agua del canal que desemboca en Playa Lisa, donde se prohibió el 9 de septiembre, como medida de prevención, el acceso de los vecinos de la localidad costera.
Los técnicos municipales del área de Medio Ambiente de la villa marinera trabajan en colaboración con la Conselleria de Medio Ambiente en la elaboración de un informe basado en el análisis de las aguas, con el fin de esclarecer su procedencia. El resultado del trabajo, según indicaron ayer fuentes municipales a este diario, se sabrá a finales de esta misma semana, pero todo hace indicar, apuntaron las mismas fuentes, a que las aguas proceden del parque natural, y que pueden haber llegado hasta el canal que acaba en Playa Lisa a través de la red de azarbes, pese a no haber una conexión directa.
Esta hipótesis, que para algunos expertos en la zona parece poco probable, es la que está tomando más fuerza en la villa marinera, teniendo en cuenta que El Hondo está vaciando actualmente el embalse de Poniente a través del azarbe de Dalt, que va a parar a la playa de la Gola, a través de la desembocadura del río Vinalopó.
La Conselleria de Medio Ambiente y Riegos de Levante acordaron vaciar el embalse de Poniente, ante el temor de que se declarase un brote de botulismo en el paraje por la alta concentración de carpas, que son una especie invasora que afectan al hábitat natural del parque.
No obstante, mientras llega una confirmación final sobre la procedencia de las aguas irregulares, desde el Ayuntamiento de Santa Pola aseguraron ayer que el agua no resulta perjudicial para la salud y que los análisis que se realizaron en días posteriores al vallado de la zona indican una mejoría, por lo que se espera que poco a poco vuelva la normalidad a Playa Lisa.
Por el momento, lo que se ha descartado es que las aguas que han levantado las sospechas procedan del Río Safari Elche.
