Los responsables de los puestos de mercadillo en las calas de Santiago Bernabéu de Santa Pola piden soluciones ante unas ventas que escasean este verano. La gente que pasa de largo, el no poder cubrir las tasas de mantenimiento y algunos cortes de luz recurrentes son varias de las causas que los vendedores consideran como origen de las malas ventas que registran este año. Algunos barajan no volver el próximo año si continúa esta tendencia en las ventas.

«Hay tres o cuatro días a la semana que nos vamos a casa con 0 euros o, como mucho, con 25 euros, es ridículo», comenta Vanessa Almendro, una de las vendedoras que este año ha instalado un puesto de bisutería, bolsos y jabones artesanos. Las personas que regentan puestos de mercadillo durante la época estival en el entorno de Santiago Bernabéu se quejan de que este verano, aproximadamente los 60 establecimientos que hay a lo largo del paseo están teniendo unas ventas muy por debajo de lo normal.

Almendro considera que el problema es que la gente no está interesada en hacer ninguna compra y que es un sentimiento generalizado. De hecho, la vendedora asegura que el gasto que desembolsan los vendedores cada mes por mantener los puestos supera los 1.000 euros, además de la cuota de autónomo y que no les rentan las ventas, por lo que se plantean hacer una recogida de firmas para solicitar al Ayuntamiento que les devuelvan las tasas municipales. Unos costes que oscilan los 115 euros, para compensar así el mal año de ventas del que se quejan. Los vendedores ambulantes quieren buscar también otra alternativa en el Consistorio como que les permitan abrir algún mes más al año. Varios de los propietarios también se han quejado de cortes de luz habituales en la zona, que ocurren bastante a menudo y que, en muchas ocasiones mantienen a los comercios sin electricidad durante intervalos que pueden llegar a la media hora. «Se va cada dos por tres la luz y aunque podemos reclamar a un técnico para que nos ayude a volver a la normalidad, el quedarnos a oscuras empeora las ventas en un año que ya está resultando complicado», asegura otro de los vendedores.