Los presupuestos municipales de 2017 en Santa Pola se llevarán a un pleno extraordinario el próximo 12 de junio. El borrador del plan presupuestario debatido por el Ejecutivo local para este año asciende a casi 30 millones de euros, aunque aún está a expensas, según Intervención, de completar y ultimar detalles.

La fecha apremia para tener todo a punto. El presupuesto, tal y como está planteado de momento en el actual borrador, llega a los 29.921.300 euros y se trata de una suma al alza que se incrementa un 2,3% respecto al presupuesto de 2016, lo que supone algo más de 680.000 euros. El texto del borrador hasta ayer por la tarde aún no estaba en manos de la oposición y, por lo tanto, aún no se ha discutido en la correspondiente comisión previa a su aprobación en pleno, en la que podría caber alguna enmienda en su caso y alteraciones en la cifra definitiva para la localidad.

El plan económico de 2017, que llega a mitad de año, se lleva en sus capítulos de gasto de personal y de bienes corrientes y servicios más del 60% del presupuesto. Se incluyen ahí retribuciones e indemnizaciones para el personal municipal y gastos en de las entidades locales y otros organismos de Santa Pola.

Los principales ingresos, como cada año, llegan a través del IBI, por el que se recaudan más de 12 millones de euros para la villa marinera. En cuanto a la aportación desde el Gobierno central, Santa Pola recibirá este año más de 6 millones de euros. La recaudación por la ocupación de vía pública, licencias y aperturas también es significativa para el incremento de presupuesto anual.

Se planea así un incremento de inversiones entre las que figura el siempre anunciado arreglo del sistema de climatización del Centro Cívico, para el que se prevén unos 500.000 euros de inversión. La reforma de los puntos accesibles de las playas de Levante y Gran Playa también se llevarán una buena parte del presupuesto, que solo en mobiliario llega a los 130.000 euros y que, en este momento, está en proceso de licitación de urgencia.

Así, en menos de dos semanas, los grupos políticos del Gobierno local y la oposición tienen que ponerse manos a la obra para determinar cómo queda el borrador definitivo de los presupuestos que se aprobarán a mediados de este mes. Por su parte, el Consell ha aportado al fondo de compensación de Servicios Sociales más de 400.000 euros que se destinarán a financiar los comedores de verano y la Xarxa Llibres, reduciendo así, el aporte municipal a estos dos servicios.

Los presupuestos que, previsiblemente, se aprobarán el próximo 12 de junio, llegan, de nuevo, con el ejercicio bastante avanzado, aunque nada comparado a lo que ocurrió en 2016, cuando se aprobaron en noviembre, a sólo mes y medio de finalizar el ejercicio fiscal y cuyas cuentas municipales no se hicieron efectivas hasta diciembre, tras los 15 días de exposición pública reglamentarios. Fueron así una rendición de cuentas más que una previsión del año. Según el Ejecutivo local, el retraso para sacar adelante su plan económico del presente año se debe a que han estado esperado a ver qué inversiones planteaba el Gobierno central para la villa marinera en los Presupuestos Generales del Estado.