?El proyecto para que las aguas negras de Tabarca dejen de verterse al mar directamente contaba con tres planes distintos. El elegido es el del bombeo de las aguas residuales a la red de saneamiento de Santa Pola, pero también existía una propuesta para mejorar las instalaciones y gestión directamente desde Tabarca y una solución mixta, que pasaba por mantener la conducción subterránea, pero con un tratamiento previo más exhaustivo dentro de la isla.