Vecinos de San Felipe Neri han registrado un escrito en el Ayuntamiento para reclamar que se ponga en marcha el servicio de vigilancia para las pedanías aprobado en pleno. Los residentes en las áreas rurales de Crevillent han avalado con más de cien firmas esta petición en la que exigen, textualmente, que el Ayuntamiento «acuerde el establecimiento de las medidas necesarias para garantizar la seguridad de los vecinos de San Felipe Neri, El Realengo, Las Casicas y el Rincón de los Pablos».

El Ayuntamiento de Crevillent acordó en pleno, con los votos a favor del PSOE, Compromís, l'Esquerra y la concejal no adscrita y la abstención de Ciudadanos y el voto en contra del PP, aprobar una moción del grupo de l'Esquerra en materia de seguridad en las partidas rurales, de la que aún no se han tomado medidas al respecto. Por eso, ahora piden de nuevo al Ayuntamiento que las ponga en marcha ante la escasez de vigilancia que acusan.

Según el secretario de la Comunidad de Regantes de San Felipe Neri, y uno de los impulsores de esta protesta, José Luis G. Salcedo, «el alcalde de Crevillent intenta la argucia de saltarse el acuerdo primero, no incluyendo en el presupuesto para 2017 la partida correspondiente al acuerdo aprobado,y, segundo, pidiendo un informe a la Subdelegación del Gobierno para justificar estadísticamente que no es necesario el establecimiento de una guardería rural para suplir las carencias de la policía local» afirmó Salcedo.

Los vecinos comenzaron a organizarse para protestar por la falta de seguridad en el área en noviembre de 2016, cuando se produjo un asalto y secuestro por varias horas de una vecina, que fue golpeada y robada en su propia casa, situada en la misma plaza de San Felipe Neri. Ante este hecho, al que se sumaban diversos robos en casas y almacenes en la población y en la huerta de las partidas rurales, el grupo municipal de l' Esquerra de Crevillent, presentó una moción al pleno del Ayuntamiento solicitando un refuerzo en la vigilancia en las pedanías y celebró una reunión con los vecinos en febrero para explicar el contenido de la moción.

Ese mismo mes, los vecinos iniciaron una recogida de firmas para pedir el incremento de la vigilancia que se presentó en el Consistorio el 23 de febrero. Muchos de estos robos no se denunciaron porque, según los afectados, la cuantía de los mismos es pequeña y dudaban de la efectividad de la denuncia. Tras esta protesta, se aprobó en pleno el refuerzo de vigilancia para las pedanías, que aún no está en vigor.