Los presupuestos municipales de 2017 han llegado a Crevillent de la mano de un consenso del Gobierno municipal con Ciudadanos tras unas negociaciones entre los dos grupos que llevan forjándose varias semanas. El plan presupuestario, tal y como está planteado en el actual borrador que se ha pactado con la formación naranja, asciende a 24.418.543 euros y se trata de una suma al alza que incrementa un 2,6% el presupuesto de 2016, lo que supone algo más de 630.000 euros. El texto del borrador está circulando desde el viernes pasado por las manos de todos los grupos políticos aunque aún no se ha discutido en la correspondiente comisión previa a su aprobación en pleno, en la que podría caber alguna enmienda.

Según el alcalde, César Asencio, se mantendrán los acuerdos tomados con el PSOE en 2016 en cuanto al plan de empleo municipal, en aspectos de industrialización y en materia solidaria. Estos temas se pactaron con los socialistas antes de aprobarse los presupuestos del año pasado y seguirán estando vigentes porque, según explica el alcalde, «el compromiso que asumí como alcalde con el PSOE no solo era para el año pasado, sino también en los próximos ejercicios», según aclaró Asencio.

El plan económico para Crevillent en 2017 recoge un paquete de medidas elaborado por Ciudadanos entre las que destacan la puesta en marcha, de inmediato, de una ambulancia de Servicio Vital Básico las 24 horas y la dotación de desfibriladores en los centros públicos municipales. Otras de las medidas destacables figuran en el área de Hacienda, donde se exige una bajada en el recibo de la basura que se haga efectiva en el segundo semestre de 2017 y la reducción del IBI para 2018.

El resto de novedades afectarían a medidas referentes a aumentar los planes de empleo, que ya acordaron PP y PSOE en 2016 y a lo que ahora Ciudadanos quiere unirse. La formación naranja también propone que se inicien los proyectos técnicos para adecuar y mejorar las entradas y salidas del municipio en dirección a Elche y Albatera, y ampliar la partida para el plan de accesibilidad. Para el portavoz de la formación naranja, José Soriano, el acuerdo con el PP ha llegado «siguiendo la línea de poner primero los intereses de los crevillentinos por delante de los del partido», según consideró el concejal de Ciudadanos en Crevillent. Además, Soriano añadió que «esto no es un cheque en blanco» y que trimestralmente pedirán informe de la ejecución de las medidas incluidas en el presupuesto municipal 2017 para «seguir fiscalizando la gestión del Gobierno municipal», según concluyó el portavoz de Ciudadanos.

No obstante, el Gobierno municipal no quiere dar la sensación de cerrar puertas al resto de partidos políticos aunque el acuerdo con Ciudadanos es tácito. Ahora se abre un periodo de reflexión al resto de grupos en el Consistorio para que presenten más propuestas, posibles enmiendas y que estudien los presupuestos en un plazo de hasta quince días, en aras de intentar concretar enmiendas que podrían ser incorporadas, y plantear el dictamen en la comisión previa al pleno. César Asencio declaró que «no porque ahora haya una mayoría para la aprobación de estos presupuestos se van a aplicar de forma mecánica o en forma de rodillo».

Oposición

De momento, la alianza de PP y Ciudadanos cuenta con la desconfianza del resto de partidos políticos. El portavoz de Compromís, José Manuel Penalva, acusa a C's de ser la «marca blanca del PP en Crevillent y corresponsable de las políticas de continuidad que se van a adoptar». Además, adelanta que no apoyarán unos presupuestos que no ahonden en un cambio sustancial y critica que haya partidas de más de dos millones de euros que no se han usado en 2016 y han quedado en el tintero.

L'Esquerra aprovechará para presentar enmiendas para destinar 40.000 euros a iniciativas propuestas por votación ciudadana o la contratación de vigilancia para mayor seguridad en las partidas rurales. La agrupación lamenta que el plan plurianual para que los vecinos de Els Pontets puedan tener agua potable difícilmente será apoyada en los presupuestos ya pactados. Por su parte, la concejal no adscrita, Lelia Laura Gomis, reaccionó afirmando que no hará ninguna enmienda y que votará en contra en el pleno porque entiende que, de otro modo, validaría unos presupuestos con los que no está de acuerdo ni en fondo ni en forma. Además considera que se «podría empezar a hablar ya de tripartito en Crevillent» aludiendo a los acuerdos entre PP, Ciudadanos y PSOE.