El PP y Ciudadanos dieron finalmente el visto bueno en el pleno de este mes en Crevillent al levantamiento de la suspensión del contrato de adjudicación a Fomento de Construcciones y Contratas SA (FCC) del servicio de recogida de basura y de limpieza viaria. El voto por el sí de Ciudadanos se sumó finalmente al del Partido Popular. Se acataba así la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana (TSJ), que declaró válido el acuerdo del pleno del Ayuntamiento de abril de 2015 por el que se adjudicaba la nueva contrata de gestión del servicio público de recogida, transporte de residuos, limpieza urbana y gestión del ecoparque a FCC.

Durante el pleno de septiembre, este levantamiento quedó en suspenso, cuando la mayoría de la oposición -PSOE, Compromís, L'Esquerra y la concejal del grupo no adscrito Leila Laura Gomis- votaron de forma negativa y Ciudadanos se abstuvo, dejando así el sí del PP en minoría, con nueve votos, frente a la postura de formalizar el contrato de servicio público de recogida a FCC.

El grupo municipal de Ciudadanos decidió cambiar su voto tras reconsiderar su abstención después de una negociación con el alcalde, César Asencio. La formación naranja dio el sí, por las consecuencias legales que podía tener la decisión en contra en el último pleno, y, según afirman, para no perjudicar a los vecinos de Crevillent con una contrata antigua. Ciudadanos se reunió con el equipo de gobierno a propuesta de Asencio, ya que la formación naranja es partidaria de la contratación de los servicios mediante concesión, en lugar de tener una gestión municipal, y así lo manifestaron en la votación.

Compromís volvió a votar en contra para la formalización de este contrato y, aseguraron, mantienen su postura en contra de la privatización de este servicio, porque «la gestión de más de veinte años del PP con este servicio privatizado deja un pueblo sucio, con multitud de necesidades en todos los barrios, pedanías y zonas industriales del municipio». La izquierda criticó que esta concesión podría prolongarse durante quince años. En cuanto a los asuntos sin dictamen en el pleno estuvo el de prorrogar por tres meses más el servicio de limpieza a Selesa mientras entra en vigor la nueva contrata. Esta acción recibió el sí de PP y Ciudadanos y la abstención del resto de grupos municipales.

En el pleno también se debatió el expediente de modificación de créditos sobre suplementos para gastos de conservación de vías públicas, contrataciones eventuales, contratos culturales, festivos, o reparación de edificios. El PP votó a favor mientras que el resto de grupos se abstuvo y quedó sobre la mesa el fraccionamiento de infracciones.

Se aprobó también una moción de Ciudadanos para la implantación de plazas de aparcamiento reguladas según tiempo máximo de permanencia.