Una operación policial conjunta ente los cuerpos de Policía Local de Santa Pola, la Policía Autonómica y el Servicio de Aduana (Agencia Tributaria) se ha saldado con la incautación de más de 50 botellas de alcohol de contenido adulterado y dudoso que se ponían de venta al público en la barraca de Pescadores y cuya infracción achacan al gerente único de la empresa Área 33, organizador de las actividades en ese recinto durante las fiestas.
En esta operación se detuvo al gerente del negocio, quien estuvo presente en el momento de las diligencias y que fue puesto a disposición de la Guardia Civil y, posteriormente a disposición judicial. Está acusado de un presunto delito de estafa continuada.
Las botellas incautadas se encuentran en las dependencias de la Policía Local de Santa Pola. Como consecuencia de las investigaciones, parte del contenido de las botellas se remitirá a Subdelegación de Gobierno para que Sanidad analice sus componentes y, según los resultados, se decida si se puede imputar al responsable, además, un presunto delito contra la salud pública.
La Policía Local de Santa Pola ha querido destacar la rápida formación y actuación de este dispositivo que comenzó a ponerse en marcha cuando los agentes locales detectaron que muchas personas que habían comprado bebida en la barraca gestionada por la empresa del detenido presentaban al día siguiente diarreas o problemas de salud demasiado agudos con respecto a la cantidad de alcohol ingerida. Desde ese momento contactaron con Vigilancia Aduanera, quienes investigaron si los sellos de las botellas con las que se elaboraban las bebidas que servían al público habían sido falsificados o modificados. Al descartarse esta opción, se amplió la operación con la participación de la Policía Autonómica.
La noche del miércoles 7 al jueves 8 de septiembre, los tres cuerpos se personaron en la barraca para iniciar la operación con el fin de descubrir el origen del alcohol suministrado. Vigilancia Aduanera se infiltró en la barraca primero e indicó a los agentes de los dos cuerpos policiales el momento preciso para intervenir. El momento llegó cuando descubrieron dentro de las instalaciones un furgón en el que cogieron «in fraganti» al gerente de la empresa y varias personas más rellenando botellas vacías de alcohol con otras sustancias paralelas.
Según fuentes de la investigación, era obvio que el alcohol rellenado no pertenecía a las marcas de las botellas. «El color del supuesto whisky encontrado en las botellas correspondientes era transparente y tenía olor de otro tipo de etanol», aseguraron desde la Policía Local de Santa Pola.
Avergonzados
El operativo señala como único responsable al gerente de la empresa y quita responsabilidad a la comparsa de Pescadores. Su presidente, Tomás Sempere, quiso aclarar que la comparsa se siente avergonzada por los hechos acaecidos y que tomará las medidas correspondientes con la empresa en la que confiaron la organización de sus actividades. Sempere aseguró sentirse engañado y una víctima de dicha empresa en la que confió la organización y la imagen de su comparsa, que ahora siente que ha sido muy dañada. El presidente asegura sentirse «una víctima más de la estafa» y ha querido pedir perdón en nombre de la comparsa Pescadores a los santapoleros y demás gente que pudiera verse afectada por la ingestión de ese alcohol adulterado en sus instalaciones.
Aseguró, además, sentirse responsable por haber confiado en dicha empresa, pero no culpable porque él no tenía conocimiento de tales hechos y que, en caso de haber sospechado algún tipo de mala praxis, «yo mismo hubiese cerrado la barraca cuanto antes». La barraca Pescadores fue cerrada por voluntad de su comparsa y anoche no abrió sus puertas en la clausura de las festividades.
Sempere espera «que caiga el peso de la ley sobre el responsable de los hechos».
