San Cayetano dejó ayer el aroma a alábegas en Crevillent, sobre todo en el barrio sur de la localidad. Una multitud de vecinos fieles a la tradición se juntaron ayer alrededor del santo copatrón de la localidad en el barrio sur y en la pedanía de El Barranco de San Cayetano.

La jornada arrancó a las 8 de la mañana con la celebración de la misa multitudinaria en la parroquia de San Cayetano. El barrio sur acogió a crevillentinos de todos los barrios para conmemorar el día del santo. Tras la celebración eucarística comenzó la procesión por las calles de Crevillent en un sendero circular repleto de alfombras de alábegas que pisaban los porteadores de San Cayetano a su paso por las calles en esta jornada dominical.

Como siempre, el momento álgido de la reunión llegó cuando, al retorno del copatrón de Crevillent a su parroquia, los vecinos se acercaron al trono para conseguir unas ramas de alábega de la imagen. Estos restos de plantas son guardados con cariño por los fieles crevillentinos para atraer suerte o para entregarlos a familiares y seres queridos.

La música corrió a cargo de la Sociedad Unión Musical, gracias a un convenio suscrito con el Ayuntamiento. Durante toda la procesión, las marchas típicas de desfiles de semana santa y de temática religiosa acompañaron a la imagen en un ambiente de más luz y color que durante la celebración pascual.

El Barranco de San Cayetano concluyó ayer sus festejos en el día de su patrón. Los actos grandes se produjeron en esta jornada que despertó bien temprano con una actividad física.

Ruta en bicicleta

Los festeros de El Barranco de San Cayetano organizaron una marcha en bicicleta hasta Albatera, donde los participantes recibieron un tentempié tras de cortesía tras el ejercicio.

Por la tarde, se realizó la procesión en honor a San Cayetano, que concluyó en la ermita de la pedanía, donde se celebró a continuación la Solemne Misa en honor al santo. Tras este acto religioso, la clausura de las fiestas de la pedanía llegó de la mano de la verbena amenizada por la cantante Maribel Castillo en el recinto festero y puso fin a una de las fiestas mas esperadas en Crevillent en agosto.