«Cruz Roja ha incorporado este año en sus puestos de socorrismo unas nuevas férulas para facilitar la inmovilización del cuerpo y trasladar mejor los pacientes hasta que logre llegar la ambulancia a las playas, esta era una necesidad que teníamos desde hace años», explicó Vanesa Agulló, coordinadora de la agrupación local de Cruz Roja. De esta forma, habrá férulas de inmovilización en cada uno de los siete puestos de vigilancia. Asimismo, el servicio de socorrismo comprende de una plantilla de 23 trabajadores, más personal de repuesto, habiendo entre dos y cinco socorristas por playa en función del tamaño de la misma. En este sentido, el servicio de socorrismo estará recorriendo la costa de la villa marinera, todos los días, hasta el próximo 11 de septiembre. s. m. p.