Santa Pola ha registrado siete desahucios en lo que va de año 2016, de los cuales se han logrado paralizar cinco hasta el momento. Sin embargo, dos de ellos se encuentran en negociaciones con los bancos. En este sentido, sin ir más lejos, el pasado lunes la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) consiguió frenar el desalojo de una familia que solicita la dación en pago y el alquiler social.

El último trimestre del pasado año la PAH presentó cinco medidas para garantizar el derecho a una vivienda y poner fin a los desahucios y a la pobreza energética, que fueron aprobadas a través de una moción por el Ayuntamiento. Estas eran: la dación en pago retroactiva, para poner fin a las deudas; los alquileres asequibles, como opción de vida segura a un precio rentable; la paralización de desahucios; y tener el suministro de agua, luz y gas garantizados, aunque esta cuestión no pertenece al gobierno municipal, sino a las multinacionales.

De esta forma, para abordar la problemática se ha creado una mesa de trabajo compuesta por un representante de cada partido político, personal de Servicios Sociales, la Oficina Municipal de Información al Consumidor, la Cruz Roja, Cáritas y la PAH. Esta comisión mixta se reúne de forma ordinaria la tercera semana de cada mes para valorar la situación en la villa marinera y tratar de llegar a acuerdos, como la implicación del departamento de asesoramiento jurídico del Ayuntamiento y la Oficina Municipal de Atención al Consumidor con la PAH. También mantienen reuniones con los bancos, negocian acuerdos con SUMA, tratan de realizar un registro de viviendas vacías en el municipio y averiguan qué deben pagar del IBI de los pisos a los bancos.

Y es que, como aseguró Trinidad Llorca, de la PAH, «este es un problema que continúa vigente, a lo que se ha añadido la problemática de la subasta telemática, que se realiza por la noche, y no te enteras de cuándo se subasta tu vivienda, hasta que ya tiene comprador, lo que dificulta aún más la paralización de los desahucios».