«Las medusas aunque no tienen un uso directo, pueden tener utilidad indirecta como fármacos», señalaron en el CIMAR. Así, estudios realizados determinan que este animal es beneficioso para elaborar medicamentos tónicos cardíacos, es decir, podrían servir para combatir infartos. Y es que «el mar es el almacén de los fármacos del futuro», según señaló Alfonso Ramos, director del CIMAR. Por tanto, «no son tan malas como parecen, son necesarias y no hay que eliminarlas todas», según apuntó.