El alcalde de Crevillent, César Asencio, ha dejado en manos de la Generalitat la puesta en marcha del alcantarillado en el barrio de La Estación, cuyos vecinos protestaron el lunes por un servicio que no llega a esta zona del municipio con suelo urbano.

El regidor destacó que «el PP ha hecho todo lo posible para que se ejecute la red de saneamiento, y ahora le corresponde a la Generalitat cumplir su compromiso». Pese a tratarse de una promesa electoral de hace cinco años, según los vecinos, Asencio aludió a que el Consell tiene la responsabilidad de hacer efectiva esta reivindicación, tras haber trasladado en las Cortes su preocupación y después de instar la construcción del colector, dado que el alcantarillado urbano ya está construido.

A ello, se suma que los residentes pagan en el recibo del agua el canon de saneamiento de la Generalitat Valenciana, con el que se financia el servicio de depuración y la construcción de infraestructuras para ampliar y mejorar este servicio, como es el caso.

En esta línea, desde el equipo de gobierno, defendieron que la Generalitat del PP incluyó esta actuación entre sus prioridades, formando parte de un programa. Asimismo, en la Ley de Acompañamiento de los Presupuestos de la Generalitat para 2011, se incluyó la necesidad de ocupación por utilidad pública de los terrenos necesarios.

Mientras tanto, los vecinos denuncian «sentirse engañados» y critican estar sufriendo humedades y daños en sus viviendas por la ausencia del servicio.

Polémica con la Policía

Por otra parte, el alcalde aseguró que el Ayuntamiento está trabajando en la valoración de todos los puestos de trabajo del Consistorio, con el asesoramiento de la Diputación, y que faltan algunos departamentos por presentar sus propuestas, pues son los propios jefes de las áreas y sus funcionarios los que las están elaborando, tras las movilización realizada esta semana por los sindicatos de la Policía Local en defensa de sus condiciones laborales.

«No es justo que se critique por la Policía Local que se está retrasando la negociación, cuando lo que falta por hacer depende de que lo hagan los propios funcionarios, ni es de recibo que los sindicatos de la Policía Local exijan ya una negociación sólo sobre sus peticiones, dejando de lado al resto de empleados del Ayuntamiento, como vienen pretendiendo desde septiembre del pasado año». Y es que, una treintena de agentes de la Policía Local denunciaron públicamente, a través de los sindicatos, el incumplimiento de cuerdos y la paralización de las negociaciones del convenio. Asimismo, criticaron la falta de respeto hacia el colectivo policial, el caso omiso de las propuestas de mejora planteadas por la plantilla y el elevado sueldo del alcalde.

En esta línea, Asencio, que no aclaró a cuánto asciende su salario, tildó de «carroñero» que los sindicatos de la Policía Local utilicen como argumento que «ellos no tienen nada, mientras que el alcalde tiene un sueldo superior al del presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, inflando además sus retribuciones sin tener en cuenta la reducción de sueldos en la Diputación ni la renuncia en el Ayuntamiento por el alcalde a la mayor parte de asistencias desde el año pasado». Ante ello, el alcalde también arremetió contra los elevados sueldos de tres cargos públicos de Compromís, que, según Asencio, en conjunto superan los 200.000 euros anuales.

Frente a ello, desde Compromís defendieron que los salarios de los diputados crevillentinos Ignasi Candela y de Aitana Mas «no los determinan ellos, ya que vienen estipulados por ley». Con respecto al salario del diputado provincial José Manuel Penalva, el grupo municipal reprochó que «fue una decisión unilateral y sin consenso del PP, con el voto favorable de César Asencio y el voto en contra del propio José Manuel Penalva. Además, desde Compromís se presentó una enmienda para rebajar el 15% del sueldo».