El Ayuntamiento de Santa Pola ha iniciado las obras de rehabilitación y adecuación del transitado puente que conecta la N-332 con la urbanización Gran Alacant, después de que el Ministerio de Fomento alertara hace un tiempo sobre el delicado estado de la infraestructura. Las obras se adjudicaron a mediados de noviembre a la empresa Tecopsa, y el plazo de ejecución del proyecto es de 4 meses. El coste total estimado asciende a 400.000 euros.

En el tiempo de ejecución de las obras, se habilitarán los desvíos pertinentes para que la empresa pueda realizar los trabajos con total seguridad. En este sentido, el ingeniero Carlos Cerdá, de la empresa Manuel Cerdá Oficina Técnica encargada de la redacción del proyecto y dirección de obra, explicó ayer que las actuaciones se dividen en seis fases.

En la primera se están evaluando los elementos estructurales del puente, así como el asfalto, las aceras, las barandillas y demás elementos de seguridad para los peatones y vehículos. Para ello se ha procedido al vallado el perímetro. El próximo lunes se inicia la segunda fase, en la que se rehabilitarán todos los elementos del puente que no afecten al tráfico rodado, como la reconstrucción de los pilares o el saneamiento de las armaduras. Además, se adecuarán los jardines de la zona sur, frente a la gasolinera.

En la fase tres, que empezará poco antes de Semana Santa, se cerrará la vía de servicio de la gasolinera para poder trabajar en elementos estructurales que están justo sobre la vía de servicio. El acceso a gasolinera se producirá a través de la glorieta de la avenida del Mediterráneo. Las actuaciones se interrumpirán durante las fiestas de Semana Santa y se abrirán todos los accesos al tráfico rodado en estas fechas de desplazamientos masivos. Después, se volverán a cerrar algunos accesos para concluir con esta fase.

En la cuatro, y en un primer momento, se desviará por la vía de servicio todo el tráfico de la N-332 hacia Alicante y no se tocará en sentido Santa Pola, para posteriormente, utilizar el actual carril de sentido Alicante para realizar el trayecto hasta Santa Pola.

En la fase cinco se mantendrán los desvíos y se efectuarán los trabajos nocturnos para reasfaltar todo el tramo desviado de la N-332. En la última fase, se abrirá la carretera nacional y se cerrará el puente por completo para arreglar las juntas de dilatación y comprobar el estado del hormigón.

Las actuaciones se completarán con el cambio de barandillas, la renovación de aceras y jardinería, la sustitución de las luces actuales por led, y la colocación de nuevas barreras de seguridad. Si todo marcha según los previsto, las obras finalizarán el 15 de junio.

Urgencia

La alcaldesa de Santa Pola, Yolanda Seva, destacó ayer la importancia de esta actuación, que viene a dotar de una mayor seguridad al puente de Gran Alacant, que soporta cada día una gran cantidad de tráfico rodado.

Seva manifestó que «estamos encantados de que se hayan iniciado ya las obras, aunque deberían de haber empezado mucho antes, pero por diversos contratiempos se ha tardado más de lo previsto». Además, la alcaldesa indicó que el Consistorio había recibido alguna llamada de atención del Ministerio de Fomento por el estado de deterioro que sufría el puente.

Por este motivo, «nos congratulamos de que todos los impedimentos hayan podido resolverse de la mejor manera y de que dentro de unos meses, esta importante rehabilitación sea una realidad», destacó Yolanda Seva.