El Ayuntamiento de Santa Pola gastó el año pasado 6.405,97 euros menos en telefonía móvil que la cantidad consumida en 2014: 18.909,04 frente a 25.313,01 euros, según informó el nuevo equipo de gobierno. De esta cantidad, explican desde el Consistorio, el 69% (4.437,86) deriva de las medidas tomadas a cabo por el concejal de Régimen Interno, Paco Carbonell.
El cambio de tendencia se aprecia cuando se estudia la media de gasto por mes, que de enero a junio del 2015 fue de 1.964,25 euros y, de julio a diciembre, fue de 1.186,93 euros.
Entre las medidas que se han tomado se encuentra la revisión de la facturación para establecer nuevos límites de gasto por línea, la eliminación de algunas líneas telefónicas y el establecimiento -próximamente- de un nuevo pliego de condiciones para obtener ventajas competitivas en la contratación de las líneas telefónicas. Además, el nuevo equipo de gobierno heredó los terminales móviles de la anterior corporación, por lo tanto no se ha realizado gasto alguno en adquirir teléfonos móviles nuevos para ningún cargo público. «El objetivo que se persigue con todas este paquete de iniciativas es conseguir que el consumo de telefonía móvil del Ayuntamiento no supere los 13.000 euros anuales y que este ahorro de dinero pueda repercutir en partidas presupuestarias tan necesarias para Santa Pola como la de ayudas sociales y en potenciar el municipio con publicidad, marketing o reforzando eventos, para desestacionalizar el turismo y que los empresarios puedan crear nuevos puestos de trabajo», comunicó el Ayuntamiento.
