Cinco de los seis acusados de introducir casi una tonelada y media de hachís desde Marruecos utilizando barcos para descargar la droga en el muelle pesquero de Santa Pola el pasado mes de marzo se enfrentan a una petición de prisión de seis años por un delito contra la salud pública en su modalidad de extrema gravedad. Para el sexto de los acusados, que tiene antecedentes penales por otro delito contra la salud pública (una condena que ya cumplió), el fiscal pide seis años y medio de prisión al concurrir el agravante de reincidencia. Los implicados fueron detenidos el pasado 3 de marzo en el marco de una operación conjunta de Guardia Civil, Policía Nacional y Vigilancia Aduanera en la que se intervinieron 1.400 kilos de hachís al interceptar una furgoneta en la autovía A70 en Alicante. La droga estaba distribuida en 44 fardos cuyo valor en el mercado habría superado los dos millones de euros.
Según el relato del fiscal en sus conclusiones provisionales tras la instrucción, los detenidos estaban organizados para adquirir hachís en Marruecos y transportarlo haciéndose valer de buques, cambiando la mercancía de barco durante la noche y descargando los fardos en Santa Pola con un barco pesquero. Al parecer, según apuntó la investigación, precisamente emplearon un pesquero y descargaron a la vista de transeúntes para intentar dar apariencia de normalidad a la mercancía.
A tenor de la calificación provisional, uno de los acusados se habría dirigido en una embarcación de gran potencia a un cabo entre Melilla y Nador entre los días 2 y 3 de marzo, cargando los 1.400 kilogramos de hachís a bordo y regresando después a la costa de Cartagena y posteriormente a una zona entre Pilar de la Horadad y Torrevieja en la que se habría realizado el transbordo de la mercancía a un buque pesquero que se dirigió a Santa Pola para que los fardos fueran finalmente desembarcados y cargados en la furgoneta. Al parecer, el tripulante de la embarcación semirrígida precisó ser rescatado por el Servicio Marítimo de la Guardia Civil por una avería y el posicionamiento de los teléfonos satélites intervenidos muestran el recorrido y coincidencia de las embarcaciones a lo largo de esa noche.
Por tanto, el fiscal considera que todos los acusados actuaban coordinados para traer hachís a España desde Marruecos y solicita, además de las penas de prisión, multas equivalentes al quíntuplo del valor de la droga intervenida (el séxtuplo en el caso del acusado con antecedentes).
Las detenciones causaron un gran revuelo entre la comunidad pesquera de Santa Pola el pasado mes de marzo. Y es que cuatro de los seis acusados eran pescadores, si bien los profesionales del sector aseguraron aquellos días que no llevaban mucho tiempo dedicándose a faenar.
Cinco de los implicados tienen nacionalidad española y el restante es ciudadano de Gambia, todos ellos entre 30 y 49 años. En cuanto fueron puestos a disposición judicial por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, se decretó por parte de los respectivos juzgados de instrucción de Alicante y Elche que cuatro de ellos ingresaran en prisión provisional a la espera del juicio (en concreto, el propietario del barco pesquero y un trabajador, el dueño de la embarcación semirrígida y el conductor de la furgoneta cargada con el alijo en la autovía, a la altura de El Campello).
