El primer «sopar del cabaset» de las fiestas patronales atrajo anoche hasta la calle Elche a casi un millar de vecinos, que ocuparon una gran parte del largo del vial.

Esta novedosa iniciativa incluida en la programación hizo que se alquilaran 120 mesas para un total de ocho comensales cada una. De esta manera, los santapoleros de distintos barrios del municipio acudieron con su cena hecha desde casa para compartir una noche en convivencia, bajo el alumbrado de fiestas y con música.

El nuevo equipo de gobierno ha introducido esta nueva actividad dentro de los festejos en honor a la Virgen de Loreto en su afán de dar prioridad a los actos en la calle.

De hecho, la concejal de Fiestas, Ana Antón ya matizó que «la fiesta necesita alegría, y así nos lo trasladan los vecinos. Hay que potenciar las actividades en la calle y el año que viene tendremos más tiempo para hacer más cambios e introducir más novedades».