Playa Lisa y Tamarit se han despedido de sus fiestas rocieras, que por primera vez se han celebrado durante el mes de julio en la localidad costera.

Los vecinos de estos barrios se volcaron el domingo en la romería con trajes de sevillana y un ambiente cargado de la esencia flamenca que les caracteriza.

Los caballos no faltaron a la cita, cuyo recorrido finalizó en la parroquia de San Antonio de Padua. Allí, los asistentes celebraron una misa rociera y después continuaron con la fiesta.

De esta manera, Playa Lisa y Tamarit cerraron cuatro días de intensas actividades en las que han sido protagonistas las actuaciones musicales, el baile y la convivencia ciudadana entre vecinos y visitantes.