Sin descanso. Las obras de la estación de autobuses han entrado en una fase crucial para acabar uno de los proyectos más reivindicados por la población santapolera. La constructora pretende poner en funcionamiento la terminal a principios de julio, salvo imprevistos, pese a que su apertura está programada oficialmente a finales de octubre. Con ello, este mes se convertirá en decisivo para poder poner a punto la infraestructura y empezar a sacarle partido durante el verano, época de mayor movimiento por la llegada de turistas.

Así, los operarios y toda la maquinaria se concentran ahora en la zona de la terminal donde los trabajos se han intensificado para tratar de adelantarse a los plazos marcados.

En este sentido, la zona de los andenes donde irán los autobuses está en estos momentos en ejecución, al igual que la urbanización perimetral. Mientras, la iluminación y el ajardinamiento ya ha comenzado a planificarse, según apuntaron desde la empresa Vectalia, encargada de la construcción de la obra.

Asimismo, sobre los terrenos ya es posible contemplar la nueva calle habilitada para la salida de los autobuses hacia la avenida Elche. Mientras que el acceso de los transportes públicos y de los vehículos se realizará por la calle Otilia.

Frente a ello, el área comercial y el aparcamiento exterior tendrán que esperar a finalizar la propia estación de autobuses, convertida en prioridad, desde el primer día de los trabajos.

Durante los meses anteriores, el recinto ha albergado la instalación de los tanques de gasóleo para la gasolinera y han habilitado un lavadero. Dos infraestructuras, que junto al aparcamiento exterior ha elevado el malestar de los vecinos residentes en los edificios próximos a las obras.

Pese a ello, desde la constructora de la estación defendieron que todos los servicios, que se pondrán en marcha, han sido proyectados y aprobados desde el «minuto cero» y garantizaron su seguridad.

Las obras de la reivindicada terminal de autobuses comenzaron el pasado mes de octubre, tras ocho largos años de espera, desde que se anunciara su construcción.

El proyecto

La infraestructura tendrá un coste de 2,5 millones de euros que asumirá la empresa Autobuses Playa de San Juan, del grupo Vectalia, encargada de la edificación y que explotará en régimen de concesión durante cuarenta años. La zona contará con un apartado de espera acristalado, aclimatado y cubierto, al igual que ocurrirá con las cuatro dársenas.Asimismo, las zonas verdes y ajardinadas se van a convertir en las principales protagonistas de la construcción, ya que tendrán una extensión de 4.010 metros cuadrados. Los aparcamientos también cobrarán importancia en el proyecto, con una superficie de 2.000 metros cuadrados. Frente a ello, la estación ocupará un espacio de 790 metros cuadrados, la estación de servicio y la tienda tendrán 1.300 metros cuadrados.