Información

Información

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

María José Egea. Gran Moravita de los Moros y Cristianos 2015

«El cargo de reina mora sirve para romper con los moldes de la transexualidad»

Recientemente ha sido elegida para representar el máximo cargo que su comparsa, los Berberiscos, le da a una mujer

María José Egea, la nueva Gran Moravita . información

Su cargo es uno de los más vistosos de las fiestas de Moros y Cristianos de una localidad, que precisamente este año celebra el 50 aniversario de esta celebración. Sin embargo, ella misma reconoce que su elección no ha sido igual de fácil que para otra, ni tampoco tan bien recibida por algunos sectores de la población. Agradecida por la aceptación y los ánimos de los festeros, María José ha conseguido uno de sus sueños y ha roto esquemas en la Festa crevillentina, como primera transexual que representa un papel crucial en los desfiles.

¿Qué le supone acceder al prestigioso puesto de Gran Moravita?

Para mí es muy importante haber conseguido este cargo, porque es una muestra de que los Moros y Cristianos me aceptan y confían en mí para representar a la Gran Moravita. Aunque sabía a todo lo que me arriesgaba, este papel va a servir para romper con los moldes de la transexualidad. Dentro de la asociación hay naturalmente gays y lesbianas y no pasa nada. Pero lo mío es la primera vez que ocurre.

¿Ha sido sencillo conseguir llegar hasta este cargo?

Muchos han luchado por mí durante mucho tiempo, pero fue un poco duro todo el proceso. Además, tuve que esperarme más que otra mujer para conseguir ser Gran Moravita, por mi condición de transexual.

¿Cómo ha reaccionado la población crevillentina ante su nombramiento?

Al ser un pueblo pequeño todo el mundo habla. Los Moros y Cristianos lo han aceptado y mi comparsa se ha portado muy bien. No tengo nada que reprochar, ni quejas hacia la Festa, sólo hacia algunas personas de fuera de la asociación, que han intentado boicotearme por ser como soy.

¿Ha llegado a ser víctima de la homofobia por su nombramiento?

Sí, por desgracia, todavía en los tiempos que corren y en pleno siglo XXI. Lo más llamativo es que una foto mía disfrazada de lacasito durante una gymkana estuvo rodando por las redes sociales durante cinco meses, con comentarios muy negativos. Se estuvieron burlando de mí durante mucho tiempo. Pero yo me enteré hace nada. La abogada de la Asociación de lesbianas, gays, bisexuales y transexuales, LGTB de Crevillent, me ayudó mucho e hizo quitar la foto de Internet, porque si no, yo me veía obligada a denunciar. Pero todo eso lo llevó a cabo alguien de fuera de la asociación de Moros y Cristianos.

¿Cómo se ha sentido al ser discriminada en los tiempos que corren por algo tan corriente como ser elegida para salir en un desfile?

Que todavía siga habiendo homofobia y discriminación hacia personas por su condición sexual es una poca vergüenza. La gente mayor del pueblo, que, como es habitual, es más cerrada y conservadora me respeta y me acepta bien. Pero, que gente joven, de 18 a 25 años haga este tipo de cosas es lamentable y de muy mal gusto.

Con este mal trago, ¿recuerda una infancia difícil o haber vivido algún otro rechazo por ser transexual?

Ha sido difícil en algunos momentos. Ahora tengo 38 años, pero llevo desde los 16 años haciendo de mujer. He vivido una infancia dura en el colegio. Sin embargo, ahora mucha más gente me acepta y se identifica conmigo. Los tiempos han cambiado bastante, aunque, en ocasiones, salgan personas homófobas.

Lo último en INF+

Compartir el artículo

stats