Después de casi tres décadas de olvido el yacimiento protohistórico de Peña Negra, ubicado en la Sierra de Crevillent, vuelve a acoger un proyecto de excavaciones, dirigido por Alberto Lorrio.
Los trabajos que se acaban de poner en marcha tienen como objetivo consolidar una vivienda y realizar una excavación arqueológica de su entorno para completar la planimetría de la zona. Además, también se va a realizar una excavación arqueológica en otro sector, trabajos de perfilado y mejoras de acceso al yacimiento, así como prospección y limpieza de la totalidad del área del yacimiento para completar el levantamiento topográfico del mismo.
El yacimiento protohistórico de Peña Negra está considerado como uno de los de mayor interés de la Comunidad Valenciana, así como de España y el Mediterráneo Occidental. De hecho, los expertos sostienen que Peña Negra se encuentra en un lugar privilegiado en las tierras septentrionales del sureste. Asimismo, el hecho de que no esté muy alejado de la desembocadura del río Segura explica su desarrollo en la antigüedad.
Hacía 27 años que la zona no acogía proyectos de excavaciones. Fue en la década de los años 70 y 80 cuando la zona acogió los últimos trabajos dirigidos por el profesor de la Universidad de Alicante Alfredo González Prats. Y a raiz de estos trabajos se pudo documentar el yacimiento con una completa secuencia estratigráfica entre los siglos IX y VI a. C. También se localizó una necrópolis de incineración vinculada al asentamiento.
El proyecto que se acaba de poner en marcha está impulsado por la Generalitat Valenciana, el Ayuntamiento de Crevillent y la Universidad de Alicante y tiene como título «En los confines de Tartessos: La Ciudad Protohistórica de Peña Negra. 2ª Fase». La actuación está financiada por la Conselleria de Cultura, que va a destinar un total de 105.930 euros.
Para Crevillent las excavaciones son importantes ya que de producirse descubrimientos, los objetos serán depositados en el Museo Arqueológico de la localidad. La edil de Cultura, Loreto Mallol, explicó que «según la Ley de Patrimonio Cultural Valenciano, los materiales obtenidos con motivo de actuaciones arqueológicas se depositarán en el museo o institución que se determine por la administración, atendiendo a su mejor conservación, función cultural y científica y, en segundo lugar, a la proximidad al lugar donde se vaya a realizar la actuación arqueológica. Y en el caso que nos ocupa si se produjese la aparición de materiales, la Consellería considera que los mismos deben ser depositados en el Museo Arqueológico de Crevillent».
