El Consell ha pasado «la pelota» a la Confederación Hidrogáfica del Segura (CHS) para acabar con los problemas de sequía que afectan a los humedales de la zona sur, entre ellos a la finca de las Salinas de Santa Pola donde han muerto miles de peces.
Según Moisés Serrano, representante del Pantanet de Santa Fe, en la reunión mantenida esta semana con la directora de Medio Ambiente, la Generalitat explicó que ha presentado las alegaciones al Plan Hidrológico 2015-2021 por el que se hace responsable a las confederaciones hidrográficas para dar el aporte hídrico a las comunidades de regantes.
En este caso, la finca afectada, está ubicada en el entorno del parque natural y pertenece a la comunidad de Carrizales. «De acuerdo a este plan, la CHS tiene potestad para dar agua no sólo por la vía agraria, es decir para los cultivos, sino también para atender a razones medioambientales, que es nuestro caso», explicó Moisés Serrano.
Ante ello, la junta rectora del Parque Natural de las Salinas de Santa Pola, el Hondo y la Mata tiene prevista una reunión con las confederaciones hidrográficas para buscar soluciones ante los problemas de sequía que ponen en peligro a la flora y la fauna de los espacios naturales protegidos.
«Queremos plantearles la importancia de que nos aporten agua y ver qué alternativas nos dan ante la mortandad de peces», señaló el representante del Pantanet de Santa Fe.
Asimismo, desde la finca afectada, van a elaborar un informe para solicitar a la Comunidad de Regantes de Carrizales que se adhieran a las alegaciones presentadas por la Conselleria de Medio Ambiente, con el fin de hacer más fuerza a la hora de recibir el aporte hídrico.
Por otra parte, desde el Pantanet de Santa Fe, destacaron que realizarán un estudio de las especies que alberga el entorno natural y que se encuentran en peligro de extinción y/o han de ser especialmente protegidas para recurrir a los planes de protección europeos.
En este caso, la finca privada, es el lugar por donde pasan aves como la cerceta pardilla y malvasía cabeciblanca.
La sequía y la falta de aportes hídricos a las Salinas de Santa Pola ha provocado este verano la consecuente muerte de más de 30.000 kilos de mujol, anguila y lubina en la zona. Y es que, la ausencia de agua y la imposibilidad de renovarla ha desencadenado en una falta de oxigeno acabando con parte de los peces que suelen entrar de forma natural a las charcas donde se crían antes de ponerlos en venta. Por el momento, según Moisés Serrano, la mortandad se ha paralizado, porque la finca se está encargando de elevar los motores para que pueda entrar los sobrantes de agua que quedan a la finca.
El Pantanet de Santa Fe forma parte de las rutas turísticas medioambientales que la Concejalía de Turismo de Santa Pola ha promovido desde el comienzo de este año para exhibir un paraje desconocido con un total de 150 especies.
