Los empresarios de Crevillent compartieron ayer sus inquietudes con el conseller de Economía, Industria, Comercio y Empleo, Máximo Buch, que se desplazó hasta la localidad para reunirse con la Unión Nacional de Fabricantes de Alfombras, Moquetas, Revestimientos e Industrias Afines (Unifam) y, posteriormente, mantener un encuentro con más de 150 empresarios de la localidad.

Durante el encuentro Máximo Buch se comprometió a modificar la legislación valenciana en materia de energía para que esta se adapte a la nueva ley estatal y que, por tanto, la Cooperativa Eléctrica «San Francisco de Así» pueda seguir distribuyendo y comercializando energía sin perder los beneficios con los que mantiene su obra social.

Y es que, según advirtió ayer mismo la Cooperativa durante el encuentro, la nueva ley estatal impide que una misma entidad distribuya y comercialice energía a la vez, obligando a la Cooperativa crevillentina a comercializar a través de otra empresa que no tendría los mismos beneficios con la actual normativa autonómica.

Por ello, urgen un cambio en la legislación valenciana para que la empresa comercializadora que surja pueda ser reconocida también como cooperativa para conservar los mismos beneficios y, por lo tanto, no poner en peligro la obra social.

Este tipo de modificación ya se ha llevado a cabo en Andalucía y Cataluña, y Buch manifestó ayer que se realizará en breve en la Comunidad Valenciana.

Otro aspecto importante trasladado al conseller de Economía fue la situación de desamparo en la que quedarían las 300 familias que invirtieron sus ahorros en la planta solar de El Realengo. Según apuntaron ayer al conseller, pese a que la planta de El Realengo está compuesta por un total de 136 instalaciones individuales, la nueva normativa la reconoce como una sola lo que supondría una importante merma a la de recibir las primas del Estado.

Concretamente, apuntaron que con la nueva legislación las primas se reducen en torno a un 25% a todas las plantas, pero en el caso único de Crevillent los inversores verían reducida su subvención en más de un 40%.

Máximo Buch aseguró que este asunto se trabajará, al igual que se hizo con las cooperativas, para que la normativa no afecte más a la planta de Crevillent que a las del resto de territorio nacional.

El conseller de Economía también se mostró ayer satisfecho con los resultados positivos que se están reflejando en las exportaciones de alfombras y moquetas de Crevillent, que en los últimos dos años han aumentado un 40%, según apuntaron ayer desde Unifam.

No obstante, desde el colectivo alfombrero realizaron ayer una serie de propuestas al conseller para dinamizar desde la administración la actividad industrial y reactivar el consumo.

Sobre este asunto, el conseller dijo que «vamos a seguir apoyando al sector para seguir exportando y ser competitivos, ya que nuestra misión es quitar trabas a la gestión empresarial y apoyar al empresariado a desarrollar su función que, básicamente, es crear puestos de trabajo a base de la internacionalización y de innovación».

Además, Máximo Buch se hizo eco de una de las principales reivindicaciones de los empresarios, la complejidad de los trámites administrativos, y aseguró que «la Generalitat Valenciana va a trabajar para simplificar trámites y va a eliminar o modificar las normas que generen más problemas».

En su visita a Crevillent, el conseller estuvo acompañado por el alcalde de Crevillent, César Augusto Asencio, el alcalde de Santa Pola, Miguel Zaragoza, y el director general de energía, Antonio Cejalvo, entre otros.