La titular del Juzgado de Instrucción número 3 de Elche ha abierto un procedimiento por un supuesto delito de homicidio en relación con las dos personas encontradas muertas este jueves en una vivienda en la localidad de Santa Pola después de que el informe provisional de la autopsia haya revelado que la mujer murió a manos de su marido.

Según ha informado el Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana (TSJCV), la jueza procedió este mismo jueves al levantamiento de los cadáveres y, ante la imposibilidad forense de determinar en el lugar si la mujer había fallecido por muerte violenta, se decidió esperar al informe provisional, que ha sido puesto a disposición de la jueza en la mañana de este viernes.

Los datos facilitados a la jueza indican que, al parecer, el hombre mató a la mujer y posteriormente se quitó la vida. La pareja, matrimonio, tenía un antecedente de violencia sobre la mujer que supuso la imposición de una pena de alejamiento de 16 meses que quedó cancelada, habiendo sido cumplida, en abril de 2010. Desde entonces, no existe ninguna otra causa en los juzgados.

La Guardia Civil recibió a las 9.30 horas de este jueves un aviso sobre la existencia de dos personas fallecidas en una vivienda de la avenida Portus de Santa Pola. Las víctimas eran una mujer de 59 años y de un hombre de 58, y sus cuerpos se encontraban en el interior del inmueble.

La Policía Judicial de la Guardia Civil investiga las circunstancias del fallecimiento de un matrimonio encontrado sin vida ayer por la mañana en su vivienda de Santa Pola, en el número 12 de la Avenida Portus Ilicitanus. El cuerpo de la mujer, de 59 años de edad, apareció tendido en la cama y el hombre, de 58, murió ahorcado. Al parecer ambos llevaban más de un día fallecidos.

Según han informado fuentes del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana (TSJCV), el matrimonio tenía un antecedente de violencia sobre la mujer que supuso la imposición de una pena de alejamiento de 16 meses que quedó cancelada, cumplida, en abril de 2010. Desde entonces, no existe ninguna otra causa en los juzgados.

Fueron encontrados en torno a las 9.30 horas por los yernos de la pareja, que acudieron a buscarles después de que las hijas no consiguieran contactar con ellos desde el día anterior y al parecer después de que no acudieran a recoger a su nieta al colegio. Los investigadores, que ayer por la mañana estuvieron durante cuatro horas en la vivienda recabando pruebas, no descartan ninguna hipótesis, incluida la posibilidad de que el hombre hubiera acabado con la vida de su esposa asfixiándola y después se hubiera ahorcado. En cualquier caso, nada se da por sentado y todas las opciones están sobre la mesa.

En un primer examen visual se apreciaron sospechas de signos de violencia sobre el cadáver de la mujer, aunque será la autopsia programada para hoy en el Instituto Anatómico Forense la que determine las causas de la muerte y por lo tanto aclare en gran medida la investigación. Lo principal será descartar o confirmar la muerte por asfixia y con ello la hipótesis del asesinato por violencia de género.

Tras el hallazgo de los cuerpos se dio aviso al Centro de Información y Coordinación de Urgencias, que envió una ambulancia al lugar, aunque el personal sanitario no pudo hacer más que certificar la muerte de la pareja.

Forense

En torno a medio día una médico forense se desplazó a la vivienda para examinar los cadáveres. Abandonó la casa pasadas las 13 horas, en compañía de la jueza y la secretaria del juzgado de guardia, que instruirá la investigación.

Mientras en el interior de la vivienda se desarrollaba el levantamiento del cadáver, la mayoría de vecinos y comercios cercanos eran ajenos al luctuoso suceso. De hecho, la discreta presencia de la Guardia Civil en la zona permitió que la investigación se iniciara sin causar alarma ni expectación en la calle.

Una vez culminado el trabajo de la forense, personal de ASV Servicios Funerarios sacó los cuerpos del edificio por una puerta trasera en un aparcamiento privado y los trasladó al Instituto Anatómico Forense de Alicante, donde hoy está previsto el examen médico pormenorizado.

A lo largo de la mañana numerosos familiares de los dos fallecidos se presentaron en la vivienda. Vecinos del edificio comentaron que desconocían que la pareja tuviera cualquier tipo de problema y se mostraron sorprendidos por los hechos, ocurridos en un edificio de unas treinta viviendas distribuidas en cinco plantas.