Cinco millones de euros. Esta fríolera cantidad se ha convertido en la culpable de que unos 200 cofrades de Santa Pola se hayan visto enfrentados por el premio de la Lotería Nacional que tocó a La Dolorosa el 22 de enero de 2011. La suerte divina de la que se hablaba por aquel entonces se ha traducido a lo largo de más de dos años en denuncias, peleas y también amenazas por el reparto del premio especial cuya beneficiaria era la cofradía, pero el dinero acabó repartiéndose entre la mayoría de los socios, dejando a una pequeña parte fuera. Ahora, la Audiencia Provincial de Alicante ha dado un paso más y ha estimado una demanda de 30 personas contra la junta directiva.

La buena nueva llegó dos días después de que se celebrara el sorteo. La Lotería Nacional había dejado en la villa marinera 9 millones de euros y entre los afortunados se encontraba la Virgen de los Dolores que durante 28 años jugaba al 40.730. Un número que, según declaró la presidenta de la entidad religiosa, María Asunción Ruíz, la cofradía vende en el municipio y con los beneficios de la lotería se paga el décimo con el que también jugó La Dolorosa y fue agraciado.

Después de conocer la gran noticia, la junta directiva decidía por unanimidad crear una fundación benéfica para ayudar a los más necesitados del pueblo. Una determinación que está bajo el amparo de los estatutos de la cofradía a los que ha accedido este diario, y en los que se plasma que "los beneficios obtenidos derivados del ejercicio de actividades económicas se destinarán exclusivamente al cumplimiento de los fines de la Cofradía, sin que quepa en ningún caso su reparto entre los cofrades".

Sin embargo, ante la crisis económica y las necesidades de los socios, la junta directiva decidió saltarse el reglamento y repartir el dinero entre 157 cofrades, sin contar con 30 personas que también pertenecían a ese colectivo de la Semana Santa. Una de las condiciones de este reparto fue destinar la mitad del montante recibido a la fundación.

La lista de los afortunados se hacía pública en el municipio bajo el título de "Los Buenos Samaritanos Cofradía de La Dolorosa". En ella, se dejaba constancia de que los socios cobraron 31.210,19 euros, excepto una cofrade que recibió 131.210,19 euros, por haber sido la depositaria del décimo, según los denunciantes.

Socios morosos

La distribución de esa lluvia de millones fue el punto de partida que encendió a los que se habían quedado fuera. Según apuntaron desde la cofradía, el requisito para recibir el dinero era que los miembros acreditaran que llevaban las cuotas al día.

Ante ello, los afectados han aludido "que la tesorera no emitía ningún recibo cuando se pagaban las cuotas y que muchas de las personas que han sido beneficiarias del décimo tampoco lo hacían, tan sólo unas 40 de 200".

Otro de los motivos que defienden los demandantes es que los estatutos recogen que para dar de baja a algún socio en la cofradía "será necesario la tramitación de un expediente disciplinario que contemple la audiencia del asociado afectado". En este sentido, los denunciantes reconocen no haber recibido ningún documento con este contenido.

Primeras demandas

En la denuncia, que un juzgado de instrucción de Elche ha archivado en dos ocasiones, los demandantes acusan a la junta directiva de falsedad documental, apropiación indebida y delito societario.

Y es que, según los afectados por el reparto del dinero, que admiten tener un diploma que les acredita como cofrades, nunca ha habido recibos cuando se pagaban las cuotas a la cofradía y acusan a la tesorera de haber roto los libros de actas con la lista de los socios.

Sin embargo, el juez instructor archivó el caso en marzo de 2012 al no existir delito societario, ni de apropiación indebida, ni observar ninguna alteración en documento privado que se utilizara para perjudicar a alguien. Ahora, después de que el pasado 20 de junio la Audiencia Provincial de Alicante haya recovocado el auto de sobreseimiento provisional, dictado por el juzgado de instrucción, se pedirá las pruebas solicitadas a la junta directiva de La Dolorosa, como los libros de actas, los socios y cuentas de la cofradía, así como la declaración de los denunciados hasta el esclarecimiento de los hechos.

Los afectados reivindican que las personas que han recibido el dinero lo devuelvan a la cofradía, que se les acredite como socios y que se destine la cuantía a fines sociales, tal y como narran los estatutos.

Este diario ha intentado ponerse en contacto con José Antonio Peral Gómez, abogado ilicitano de la cofradía de La Dolorosa, sin poder haber recibido ninguna valoración.

Cuentas bloqueadas desde agosto de 2011

La Audiencia Provincial de Alcante mantiene bloqueadas las cuentas de la Cofradía de La Dolorosa, como medida cautelar a instancias de los denunciantes desde agosto del pasado 2011. Concretamente, el bloqueo se ha realizado sobre dos cuentas, la primera de ellas, con un saldo de 2.375.000 euros, corresponde al dinero aportado por los cofrades agraciados con el premio para la constitución de la fundación benéfica, además de los intereses generados por el plazo fijo. Mientras que, la segunda, hace referencia a un saldo de 70.740,20 euros que se ingresaron en dicha cuenta para atender los gastos corrientes de la asociación, así como para hacer frente a los gastos aprobados en asamblea, tales como un nuevo manto, un nuevo estandarte, la restauración integral del trono, entre otros.