El compositor y director de Crevillent Ramón Mas López falleció en la madrugada del pasado sábado a los ochenta y un años de edad. Autor de una zarzuela, varias cantatas, un Stabat Mater y un sinfín de marchas procesionales, de Moros y Cristianos y pasodobles, Ramón Mas López contaba además con un amplio historial de premios y distinciones entre las que destacan la dedicación de una plaza por parte del Ayuntamiento de Crevillent y la Medalla de Plata de la Villa.

Ramón Mas López, considerado como uno de los músicos más importantes de Crevillent, falleció a la una de la madrugada del sábado como consecuencia de una larga enfermedad. Hombre de una gran vocación musical aprendió muy pronto solfeo de la mano de su padre. A los once años, y tras haber estudiado con los profesores Manuel Aznar Alfonso y Antonio Pérez Soler, entró a formar parte de la Banda Unión Musical, convirtiéndose a los pocos meses de su incorporación en solista de trompeta, alternando su formación con el Maestro y Director Militar Francisco Torres Navarro. Posteriormente, Mas López cursó estudios de composición, contrapunto, instrumentación, orquestación, estética, formas musicales y conjunto coral.

Ramón Mas López fue director de Coral Crevillentina (1988-1992), Coral Ilicitana (1957-1958), Grupo Cantores Alfombras Imperial (1963-1989), masa coral de voces graves de la que fue su fundador, y de la banda de la Sociedad Unión Musical de Crevillent (1959-1983).

Durante su trayectoria musical obtuvo un buen número de galardones, entre los que destacan seis primeros premios en el Concurso Nacional de Habaneras y Polifonía de Torrevieja, dos primeros premios en el Concurso Nacional de Habaneras de Totana, un primer premio en el Concurso Nacional de Zarzuela de Petrer y un primer premio de composición festera, entre otros reconocimientos.

Además, el crevillentino estaba en disposición de la insignia de oro del Grupo Cantores Alfombras Imperial, la Sociedad Unión Musical y el Orfeón Fernández Caballero de Murcia. Por su parte, la Federación de Cofradías y Hermandades de Semana Santa de Crevillent y la Asociación de Fiestas de Moros y Cristianos "San Francisco de Asís", lo nombraron cofrade y asociado de honor, respectivamente.

También el Ayuntamiento de Crevillent había reconocido su trayectoria musical concediéndole la Medalla de Plata de la Villa e inaugurando el 23 de diciembre de 2006 una plaza con el nombre de "Compositor Ramón Mas López".

En su faceta de compositor, Ramón Mas López fue autor de una zarzuela "La moza del robledal", varias cantatas, dos misas, entre ellas la Misa Festera de Moros y Cristianos, el Himno de la Asociación de Fiestas de Moros y Cristianos "San Francisco de Asís", y un sinfín de marchas procesionales, de Moros y Cristianos, y pasodobles.

Ramón Mas López recibió ayer cristiana sepultura en la parroquia Nuestra Señora de Belén, ante la presencia de centenares de personas entre las que se encontraban músicos y directores de masas corales y bandas de músicas. La Banda Unión Musical interpretó durante la despedida del duelo la marcha procesional "Un dolor" de autor anónimo, ya que se trataba de una de las marchas preferidas del compositor crevillentino.

Un hombre valorado

El alcalde de Crevillent, Cesar Augusto Asencio, lamentó ayer la pérdida de este crevillentino al que definió como "una gran persona, un gran hombre, un gran músico, que hizo de la música su vida y pasión". En el mismo sentido se pronunciaban ayer los presidentes de la Federación de Cofradías y Hermandades, José Antonio Maciá, y de la Asociación de Fiestas de Moros y Cristianos, José Ángel Asencio, con las que siempre mantuvo una estrecha colaboración. Las masas corales de la localidad también han sentido su pérdida, por ser un hombre "siempre dispuesto a colaborar en el montaje de cualquier obra".

Por su parte, la Sociedad Unión Musical de Crevillent, de la que fue director durante 24 años, manifestó que "lo más bonito que puede decirse de Ramón es que su legado musical y personal hará que siga vivo en la mente y en el corazón de las personas que tuvimos la suerte de disfrutar de su amistad y su magisterio, por medio de su gran cantidad de composiciones y, sobre todo, mediante la ingente cantidad de alumnos en quienes inculcó el amor por la música y que hoy nutren nuestra banda gracias a él".