Los Moros y Cristianos lucieron ayer sus mejores galas para participar en la Entrada, en la que, un año más, los integrantes de cada comparsa intentaron superarse con la vistosidad de su indumentaria. Así, el desfile destacó por el atractivo de numerosos trajes de ambos bandos que se complementaban con cuidados maquillajes de fantasía.

El bando moro se encargó de abrir este año la Entrada. Concretamente, la responsabilidad recayó sobre la comparsa Bereberes, que, además tuvo este honor coincidiendo con la celebración de su 25 aniversario. Tras ellos desfilaron "Llaganyosos" y "Beduinos", el colectivo festero más numeroso.

Las tropas de la media luna desfilaron de manera majestuosa por las calles engalanadas de Santa Pola, algo a lo que contribuyeron alrededor de una veintena de bandas de música que crear el ambiente festivo en las calles.

Aproximadamente, otras tantas agrupaciones musicales tomaron parte con el bando cristiano, que llegó con la comparsa Piratas a la cabeza. Se trató de una apertura a lo grande ya que "Piratas", además de su boato particular, llegó acompañada de un espectáculo de Crevillent que encandiló a grandes y pequeños.

De hecho, y pese a que la metereorología y concretamente la lluvia estuvo amenazando durante todo el día de ayer -como el anterior- el público llenó el trayecto habitual del recorrido de la Entrada de Moros y Cristianos.

El bando cristiano, que se completaba con las comparsas de Astures, Templarios y Almogavers, se encargó de llevar el espíritu festero a las calles con sus animadas marchas. Con esta espectacular Entrada la Asociación de Moros y Cristianos despidió su participación en los desfiles festeros, ya que el día 7 tomarán parte en la Ofrenda Floral a la Virgen de Loreto.

En total, en la Entrada participarán alrededor de 1.200 festeros de la localidad a los que hay que añadir las cuarenta bandas de música y algún boato llegado de otras poblaciones cercanas.

En la tribuna de autoridades, junto al alcalde, Miguel Zaragoza, presenciaron el desfile la presidenta de la Diputación, Luisa Pastor, y Sara Montiel.