La Dolorosa congregó ayer a una multitud de crevillentinos en la parroquia Nuestra Señora de Belén. Las naves del templo parroquial volvieron a llenarse un año más en el último día del Septenario, el Viernes de Dolores.

El director del Septenario de Dolores, Octavio Penalva, destacó que "hemos tenido un Septenario bastante bueno. La gente ha asistido mucho a los ensayos y eso se ha notado en el resultado final".

El coro popular que cada año se forma para cantar a la Virgen de los Dolores, que el año pasado fue coronada canónicamente, ha estado compuesto por 120 voces (cincuenta hombres y 70 mujeres). En este sentido, Octavio Penalva dijo que "este año no nos podemos quejar porque hemos contado con un buen número de hombres".

Las homilías del Septenario en honor a Nuestra Señora de los Dolores de este año han sido ofrecidas por el asesor espiritual y hermano mayor de la Real Maestranza de Caltanisseta de Sicilia, Giovanni Lanzafame, y los párrocos locales Miguel Riquelme y Pedro Crespo.