Esquerra Unida ha presentado ante el Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana un recurso contencioso administrativo contra el Plan General de Ordenación Urbana de Santa Pola, aprobado el 16 de diciembre de 2008, por el impacto medioambiental que supone el proyecto y por la ausencia de informes y procedimientos de evaluación requeridos para llevarlo a cabo. Según Miguel Ángel Pavón, miembro de Medio Ambiente y Territorio de Esquerra Unida, la actuación que el Ayuntamiento de Santa Pola pretende acometer y que afectaría sobre todo a la parte del Clot de Galvany y las Salinas de Santa Pola, espacios protegidos por la Unión Europea, carecen de legalidad porque el Plan General no cuenta con el proceso de evaluación ambiental estratégica, ni tampoco se ha realizado un estudio que evalúe el impacto sobre el paisaje.

Son las dos primeras razones que han centrado el recurso anunciado ahora pero formalizado en junio, que se encuentra en la fase de presentación de pruebas y, que para finales de año espera que concluya. Pero, además de estos motivos, desde Esquerra Unida han señalado que el Plan General cuenta con un expediente desfavorable emitido por la Confederación Hidrográfica del Júcar por que no se acredita la disponibilidad de recursos hídricos para regar el campo de golf proyectado en el sector de Balsares.

Y es que, con este proyecto urbanístico, esta zona albergaría, además, la construcción de unas 5.200 viviendas y un complejo hotelero, lo que supone, según Pavón, la destrucción del Clot de Galvany y la amplificación de los efectos negativos. Con estos argumentos, desde Esquerra Unida esperan que el recurso pueda ser anulado y, en caso negativo, estarían dispuestos a llegar al Tribunal Supremo. "Hay que denunciar este plan general porque es un claro ejemplo de urbanismo desmedido, aprobado en plena crisis económica y es insostenible", destacó ayer Lluis Torro, diputado autonómico de EUPV.

Así, dicho proyecto conllevaría, según Esquerra Unida, el incremento de la zona urbanizable en 4 millones de metros cuadrados y desembocaría en la triplicación de la población de Santa Pola. "Es desmesurado, y con el impacto social medioambiental y económico que va a tener en la localidad va a ser imposible mantenerlo ni con los impuestos y la deuda municipal aumentará gravemente", apuntó Miguel Ángel Pavón.

Como medida alternativa al respecto, desde EU proponen como prioridad el crecimiento del núcleo urbano, en caso de ser necesaria una ampliación de la localidad. También consideran innecesario un mayor desarrollo en el Gran Alacant, ya que se muestran contrarios al modelo de segunda residencia, que ha llevado a una destrucción de las condiciones medioambientales de la zona.