Un nuevo capítulo de inestabilidad laboral estalló ayer en Crevillent. Esta vez, la empresa envuelta en rumores de cierre y despidos es la planta de producción de caramelos y golosinas Haribo, ubicada en el polígono Cachapet.

El miedo al desempleo se pudo ver ayer entre los trabajadores de la empresa que presenciaron cómo una grúa extraía de sus naves uno de los seis trenes de producción que Haribo tiene en Crevillent, y que ha decidido trasladar hasta sus instalaciones de Girona.

Según pudo saber este diario, el argumento dado por la dirección de Haribo para trasladar este tren de producción es que en Girona se le va a sacar más rendimiento. No obstante, fuentes del comité de empresa de Haribo aseguraron que "con una mínima inversión, menos de lo que cuesta su traslado y montaje, el tren podría funcionar muy bien en Crevillent".

Para el comité de empresa, el de ayer fue el primer capítulo de unos cuantos que podrían terminar con el cierre de la empresa de Crevillent con un traslado total a Girona. En la actualidad, Haribo da trabajo a unas 120 personas en Crevillent, unos puestos de empleo que "están en juego" según el comité.

Hasta la fecha, y pese al malestar de los empleados, la dirección de Haribo no ha explicado cuáles son sus intenciones y tampoco se ha apresurado a desmentir los rumores sobre su traslado total a Girona donde, según se apuntó ayer, "ya se están preparando las naves para acoger toda la producción que se viene realizando en Crevillent".

El comité de empresa mostró su descontento porque "en los últimos tiempos se ha abandonado la inversión en Crevillent, mientras que en Girona se han invertido varios millones de euros". Además, las mismas fuentes indicaron que "durante los últimos meses se está trabajando mucho en Crevillent, llenando los almacenes más de la cuenta". Lo que da que pensar que se pueda estar fabricando mucho producto para no desabastecer el mercado durante el tiempo que durase el hipotético traslado a Girona.

Por su parte, la dirección de la empresa emitió un escueto comunicado ayer por la tarde en el que argumentó que "el desplazamiento de maquinaria de una fábrica a otra es un procedimiento habitual en la compañía y sólo responde a una necesidad de producción, en este caso de la fábrica de Cornellà de Terri, en Girona".

Respecto al futuro de la fábrica de Crevillent, el mismo comunicado dijo que "la compañía estudia varias alternativas, y si la alternativa prevista lo requiere se comunicará convenientemente a los representantes de los trabajadores". El comité de empresa ha convocado a todos los trabajadores a una asamblea informativa que celebrará hoy viernes.