L a Dirección de Patrimonio Cultural Valenciano de la Generalitat ha rechazado el recurso contra la destrucción parcial de la villa romana hallada en El Campello durante las obras de la segunda circunvalación de Alicante, que fue presentado el pasado mes de agosto por la Colla Muntanyenca. Ante esta comunicación, el colectivo ecologista anunció ayer que van a reclamar a la Conselleria de Cultura la declaración de Bien de Interés Cultural (BIC); para lo que ha quedado de la villa romana, después de ser parcialmente destruida tras autorizar el Consell el desmontaje de la parte del enclave afectado por el trazado de la circunvalación, que representaba un 80 por ciento de los restos hallados. Del mismo modo van a pedir al Ayuntamiento que el enclave se incluya en el nuevo PGOU, que no la contempla, para asegurar su protección y salvaguardar su entorno para realizar más excavaciones.

Desde la Colla su presidente Jaume Varó explicó que arqueólogos independientes que visitaron el enclave sospechan de la existencia de una necrópolis en la zona que aún no habría sido hallada y podría encontrarse a la otra parte de un pequeño barranco. Diversos expertos han manifestado que existen indicios de que la villa romana, que data de entre los siglos I a.C. y I d.C., se extiende más allá de lo que se ha excavado, ya que afirman que las prospecciones se han centrado sólo en la zona afectada por el proyecto de la circunvalación.

En cuanto al recurso de alzada contra la resolución de Patrimonio que ha rechazado esta institución, Cultura no entra a valorar las consideraciones realizadas por la Colla. Los ecologistas afirmaban que el informe en el que se basaba la autorización de destrucción de la villa romana era «tendencioso», ya que pese a reconocer el estudio arqueológico el valor y buena conservación de las termas y el hallazgo incluso de restos prerromanos - cerámicas de origen griego, cartaginés, ibérico e itálico - , resolvía que el enclave no tenía suficiente entidad para ser conservado. Patrimonio se limita a explicar que en el recurso «no se invocan motivos de nulidad y anulabilidad que son los que deben fundamentar la interposición del recurso y los que determinan para la administración la obligación de revisar el acto cuestionado con el fin de confirmar su legalidad o de revocarlo». La cuestión es que el mal ya estaba hecho y el informe en el que se basaba la destrucción se hizo público cuando ya se había arrasado el enclave.

Del mismo modo los ecologistas y arqueólogos manifiestan su indignación porque la destrucción se ha hecho de una forma «encubierta», ya que la Conselleria decretó que la parte afectada se desmontara manualmente con supervisión de arqueólogos, para poder guardar los restos y poder reconstruir la villa más tarde, y ésta se realizó sin ninguna catalogación, apilando las piedras sin ningún orden y convirtiendo en una quimera la posibilidad de reconstruir la villa a partir de un montón

Cabe destacar que el Ministerio de Cultura ha reclamado al Consistorio información sobre la villa romana ante las denuncias que ha recibido sobre este caso.