Los profesores y alumnos del Instituto de Formación Profesional Canastell han iniciado este mes de junio la renovación de la instalación eléctrica, el repintado del centro y están modernizando la iluminación. Ante el retraso por parte de la Conselleria de Educación en abordar la reforma integral del recinto, la dirección ha optado por parchearlo por sus propios medios. Las obras citadas las ejecuta la propia comunidad escolar directamente. Otras se han contratado con una empresa, como la sustitución de las cubiertas, muy necesaria porque en la última planta hay goteras.
A finales del curso pasado el IES Canastell se quedó esperando la reforma del establecimiento, pues desde la Generalitat les habían comunicado que iba a acometerse ese verano. De hecho, llegaron a desmontarse algunas piezas que luego hubo que recomponer.
Este curso no han tenido noticias nuevas y sólo el Ayuntamiento le ha echado una mano con la jardinería, que habían dejado abandonada porque se iban a realizar las obras. Ahora, en vista de la situación económica del Consell, la dirección ha decidido acometer por sus propios medios las actuaciones de mantenimiento más urgentes y relacionadas con los estudios que imparten con el fin de funcionar en condiciones dignas a principios del nuevo curso. "Sabiendo que la reforma va a tardar, vamos a invertir en mantenerlo porque sabemos que vamos a tener que pasar tiempo aquí", explica el director, Carlos Navas.
El edificio principal, construido unos 26 años atrás, no tiene problemas estructurales pero era necesario cambiar ya la instalación eléctrica. Los alumnos están trabajando en ello ya que, según explica el responsable del centro, a ellos les resulta un aprendizaje interesante por las grandes dimensiones del edificio principal. También se han sustituido las luminarias por otras nuevas de tecnología led, para ahorrar en el gasto energético.
Por otra parte, una empresa cambiará las cubiertas y la dirección está estudiando colocar placas solares aprovechando que el instituto impartirá un curso del Servef de instalaciones de este tipo.
También se ha ampliado el espacio del taller de locomoción, se están pintando parte de las instalaciones y se ha alquilado una nave en el polígono Canastell para las clases de embarcaciones.
Pero todas estas reformas no serán suficientes pues el centro tiene muchas carencias ya que se han ido realizando reformas y ganando espacios, por ejemplo, con un antiguo parvulario, cuya adaptación se realizó en precario. Prueba de ello es un taller donde los cuadros eléctricos están superpuestos a las espalderas del gimnasio que había antes allí.
El proyecto de Educación preveía la sustitución de la carpintería, del sistema eléctrico y, según indica Navas, se contemplaba ampliar el edificio principal. El antiguo parvulario se iba a derribar y en esa parte de la parcela se iban a habilitar talleres de automoción, de barcos y sanitarios.
Las reformas costarán al instituto entre 30.000 y 35.000 euros y el director agradece "el esfuerzo del profesorado, de muchos alumnos y del Ayuntamiento" para paliar esta situación.
A pesar de las dificultades económicas que padecen los centros educativos públicos, el IES Canastell puede sufragar este gasto gracias a que completa su formación reglada con programas que comparte con el Ayuntamiento, el Servef y entidades como Coepa, Helados Alacant y la Asociación de Profesionales de Montaje Eléctrico.
La demanda de alumnos se dispara
El alto índice de desempleo ha disparado el número de personas que desean realizar estudios en el IES Canastell. El pasado ejercicio, entre los cursos reglados y el resto sumaron cerca de dos mil alumnos. Para el próximo curso las preinscripciones duplican ya a la oferta, a pesar de que en junio sólo se realiza entre el 60 y el 70% del total.
El director indica que el año pasado ya se notó la crisis registrando un importante incremento y que se trata de atender la demanda ampliando el número de grupos en ocho más.
