Sobrecogidos por el dictamen de las urnas, los candidatos socialistas de l'Alacantí -a excepción de Xixona- vivieron con decepción no disimulada la primera jornada postelectoral. Enfrente, la satisfacción e incredulidad de los populares de Mutxamel y Sant Joan, que arrancarán la nueva legislatura con mayorías absolutas sin necesidad de pactar con algunos partidos minoritarios que han conseguido contra todo pronóstico hacerse con actas de concejales. Si duro es asumir el descalabro de Rufino Selva o Pepe Varó en la oposición de San Vicente y El Campello, que pierden un concejal cada uno, el varapalo que los votantes han infringido a Asunción Llorens y Edmundo Seva -alcaldes socialista de Mutxamel y Sant Joan con mayoría- toma tintes dramáticos.

El único consuelo para el socialismo de la comarca es el caso de Xixona, donde el alcalde Ferrán Verdú mantiene su gran ventaja frente a los tres regidores del PP y los dos de Esquerra Republicana.

En cambio, en Sant Joan, el desánimo y la sorpresa eran la tónica general en el PSOE, cuyas previsiones más pesimistas pasaban por perder la mayoría absoluta y tener que pactar con el Bloc o EU, pero no por este estrepitoso resultado. Pocos esperaban que el candidato del PP, Manuel Aracil, consiguiera la mayoría absoluta. Máxime teniendo en cuenta que no contó en su lista con destacados ripollistas, a los que se fulminó; que confeccionó una candidatura con gente inexperta; y que en campaña ha sufrido algún patinazo, como llevar en el número tres a la recién elegida presidenta de la Asociación de Comerciantes, Charo Tomás, quien se vio obligada a dimitir tras dos semanas en el cargo.

En Mutxamel, Llorens pierde 1.188 votos y dos concejales con respecto a los comicios de 2007 en los que logró ocho ediles. La mutxamelera sabía que, en el escenario de empate de votos con el PP que se ha venido registrando en las últimas contiendas electorales, el "efecto Zapatero" jugaba en su contra, aunque confiaba en que su gestión y un posible pacto con EU evitaría el desastre. Ayer, Llorens acudió a la reunión que la ejecutiva socialista celebró en Valencia y evitó hacer declaraciones antes de analizar "con tranquilidad" los resultados.

Por su parte, el futuro alcalde de Mutxamel, Sebastián Cañadas, estaba exultante tras conseguir los 12 concejales que le dan la mayoría absoluta -en este mandato la corporación pasa de 17 a 21 concejales-. Reiteró su compromiso de gobernar con "honradez, austeridad, transparencia y rigurosidad".

El vuelco electoral en los partidos mayoritarios no ha sido la única sorpresa en Mutxamel en donde el partido independiente Gent d'Ací logra entrar en el Consistorio con dos concejales, José Antonio Martínez Ramos y África Blanco Suárez, que son matrimonio. El candidato de EU, Salvador Miralles, es el único edil que logra esta formación. Ni unos ni otro serán necesarios para ningún pacto.

En Agost, la próxima legislatura lleva camino de ser un calco de la que ahora termina, aunque cambiando a los actores principales. Hace cuatro años el PSOE, con cinco ediles, gobernó en minoría, frente a los tres ediles del PP y los otros tres de la Agrupació d'Independents d'Agost (AIA), quienes se unieron en varias ocasiones para tumbar propuestas de los socialistas, como en los presupuestos o la subida del IBI. Esta vez, el PP ha ganado también con cinco actas y por minoría, mientras que el PSOE suma cuatro y AIA dos. Los independientes vuelven a ser la llave y no cierran la puerta "a ninguna opción",afirmó ayer el alcaldable, Paco Lozano, aunque lo probable es que el PP lidie en solitario.

A pesar de que en San Vicente el PSOE ya estaba en la oposición, el revés del domingo ha sido histórico. La lista del PP, con Luisa Pastor al frente, ha obtenido 13.397 votos -15 ediles- y saca una ventaja de 8.025 sufragios a la candidatura del socialista Rufino Selva, quien sólo recabó 5.372 votos y se queda con seis de los 15 ediles de la Corporación. EU le sigue de cerca, con cuatro regidores.

Una victoria amarga puede ser la del popular Juan José Berenguer en El Campello, quien se ha quedado con diez ediles, a uno de la mayoría absoluta. Ayer se sucedían los contactos para posibles pactos, aunque una hipotética alianza de los cinco partidos de la oposición para desalojar al PP se antoja casi imposible, por lo que el municipio parece, salvo un giro total, abocado a un gobierno en minoría de esta formación, donde el cisma interno ha vuelto a aflorar.

El PSOE de Pepe Varó ha obtenido seis concejales y dos el Bloc. Decido, de Marita Carratalá, logra uno, al igual que EU, con Silvestre Pérez e Iniciativa per El Campello con Noemí Soto. Sólo ésta última se muestra claramente partidaria de buscar un acuerdo.

En Aigües, el PP volvió a ganar los comicios, por solo doce votos de diferencia con respecto al PSOE, que experimenta un aumento espectacular. Los dos partidos tienen cuatro ediles cada uno, mientras que Iniciativa Independiente se queda con el noveno, el que decantará los apoyos a uno u otro lado.