Los recortes en las inversiones de la Conselleria de Educación en la comarca de l'Alacantí son evidentes en este arranque del nuevo curso escolar que comienza, sin que se haya ejecutado o esté previsto a corto plazo ninguno de los colegios públicos que los municipios llevan años reclamando para hacer frente a la creciente demanda de plazas. Además, el deterioro que sufren algunos centros pendientes de reformas que la Conselleria no acomete ha movido a algunos Ayuntamientos a destinar fondos del Plan E del Gobierno central para ejecutar esas mejoras. Así, los cerca de once mil escolares de Primaria y los 8.500 de Secundaria de la comarca que comienzan sus clases en los próximos días tendrán desigual suerte dependiendo del centro que les corresponda.

En San Vicente del Raspeig 4.825 niños comienzan el curso de Primaria, de ellos 625 en Infantil de tres años, 575 en cuatro años, y 650 en cinco años. Una de las novedades más importantes en San Vicente debe ser la puesta en marcha del comedor del colegio Juan Ramón Jiménez, una de las obras más reivindicadas ya que su carencia obliga a cortar el tráfico en la calle del Doctor Marañón para que los escolares crucen al colegio Azorín a la hora de la comida. En todo caso, el Ayuntamiento no prevé que estas obras, financiadas con el Plan E, acaben hasta noviembre o diciembre por lo que estima que el servicio entrará en funcionamiento en el primer trimestre de 2011. En otros colegios se han ejecutado obras como adecuación de baños o de aulas, además de otras actuaciones como reparación de puertas y ventanas, pintura, vallado o arreglo de patios y pistas deportivas. Quizás el centro con más obras ha sido el colegio Número 12 -centro Maigmó-, pues se ha trabajado en aulas, aseos y pistas deportivas.

Mientras, las ratios en las aulas de San Vicente es una de las cuestiones que más preocupan al delegado de CC OO en l'Alacantí, Alfonso Terol, pues recuerda que el curso pasado acabaron altas y teme que este año se agrave la situación. También recuerda que el instituto Canastell sigue pendiente de una profunda remodelación, muy necesaria ante la antigüedad de las aulas, "pero seguimos esperando a que esta obra aparezca en los presupuestos".

En Primaria también se sigue esperando la construcción de un nuevo edificio para el colegio Número 12, si bien el Ayuntamiento anunció que este otoño está prevista la cesión de una parcela del plan Montoyos a la Generalitat para que lo construya. De momento, en este último edificio se han hecho obras para que este curso escolar esté en las mejores condiciones y, de cara al ejercicio 2011-2012 se plantea ampliarlo con el edificio colindante, sede de la Enseñanza Permanente de Adultos -EPA- y de la Escuela de Idiomas.

En San Vicente, alrededor de 3.155 alumnos iniciarán las clases en Secundaria -1.700 en ESO y 1.455 en BAT y Ciclos Formativos-.

En El Campello el número de barracones para el curso que arranca ahora se incrementa en uno, ya que el colegio Fabraquer pasará a tener nueve prefabricadas, a la espera de que se construya el quinto centro educativo de Primaria en Las Lanzas. El número de escolares se mantiene en torno a los 2.150 en los colegios y un millar más en institutos. La edil de Educación, María Cámara, destacó que el Consistorio ha llevado a cabo reformas en los cuatro colegios públicos para mejorar las instalaciones, en parte con fondos del Plan E, y que la Conselleria sigue adelante con la tramitación para la construcción del quinto colegio, que permitirá descongestionar el Fabraquer. También se está a la espera de que se ejecute la ampliación del IES Enric Valor. Este instituto mantiene este año los barracones con un alto grado de masificación mientras que el IES Clot de l'Illot fue reformado a principios de año, por lo que las prefabricadas que se instalaron para las obras ya fueron retiradas durante el pasado ejercicio lectivo. Cámara también resaltó que las matriculaciones se han desarrollado sin problemas.

Xixona vive durante este curso las dos caras de la moneda. Por una parte, ya ha concluido la primera fase de la ambiciosa ampliación que va a cambiar por completo el IES del municipio. Mientras duren las obras, los alrededor de 400 alumnos tendrán que pagar un peaje que no es otro que recibir las clases en aulas prefabricadas. A cambio, podrán disfrutar de un nuevo comedor y se espera que durante el curso 2011-2012 tengan a su disposición las nuevas instalaciones.

Por el contrario las reformas previstas en el colegio Cristòfol Colom -uno de los tres centros del municipio construido a mediados de los 70- que se iban a acometer durante el verano con un presupuesto cercano a los 700.000 euros no se han iniciado, lamenta la edil de Educación, María Teresa Carbonell, quien pese a intentarlo arduamente durante los últimos meses aún no ha conseguido que la directora general de Régimen Económico de la Conselleria de Educación, María José Vargas, le explique la razón del retraso. También está pendiente la mejora de la accesibilidad en el colegio Eloy Coloma.

En Mutxamel iniciarán el curso alrededor de 1.500 escolares de Primaria. La demanda de plazas ha obligado a habilitar un aula más de Infantil en el colegio Manuel Antón que estrena comedor escolar así como el colegio Arbre Blanc. Por lo que respecta a Secundaria, en el IES Mutxamel los recortes han llegado en forma de supresión de la línea de valenciano para bachillerato.