La mitad de los niños cuyos padres quieren que estudien en línea de valenciano se ven obligados a cursar las clases en castellano ante la insuficiencia de plazas ofertadas por la Conselleria de Educación, según denunció ayer Escola Valenciana. Este colectivo presentó ayer un informe sobre las previsiones de matriculación para el próximo curso después de haber realizado un sondeo en 230 colegios de 47 municipios de más de 40.000 habitantes en la Comunidad, entre ellos San Vicente del Raspeig, Alicante, Benidorm, Dénia, Alcoy, Elche, La Vila Joiosa, Mutxamel, Petrer, o Santa Pola.

"Del estudio se extrae que los padres y madres eligen en primera opción la enseñanza en valenciano, lógicamente siempre y cuando la Conselleria oferta esta posibilidad". En total, indica, "el 61,2 % de las familias que matriculan a los hijos de tres años para el curso 2010-2011 quieren que estudien en valenciano". Para atender esta demanda, agregan, Educación debería "aumentar al doble la oferta de plazas" pues de los 448.295 alumnos de Infantil y Primaria, sólo 125.953 pueden matricularse en la lengua cooficial de la Comunidad cuando, según asegura este colectivo, "la cifra de alumnado podría ascender a 274.357 alumnos".

Sin embargo, apuntan, la Conselleria lleva a cabo "estrategias de marginación de nuestra lengua" como "la paralización de la apertura de nuevas líneas" o el "borrador del decreto que prohibirá incorporar progresivamente el valenciano en los centros de enseñanza monolingüe".

La Conselleria de Educación replicó que el número de alumnos que estudia en valenciano ha crecido un 185% en la última década, ya que se ha pasado de los 74.277 alumnos en el curso 1995-1996 a los 211.436 del actual curso académico. Según asegura, el estudio "carece de rigor y cabe englobarlo dentro de una campaña interesada" pues "los hechos objetivos son que este año se ha producido un notable incremento de los estudiantes que reciben sus clases en valenciano", de manera que se ha superado los 200.000 alumnos".