Antiu Xixona, uno de los grupos turroneros más relevantes de España, hará oficial esta semana un ambicioso plan de expansión. La empresa está ultimando la compra de 16 parcelas del polígono "El Espartal III", más conocido como el del Sepiva (empresa pública dependiente de la Generalitat), para construir allí una macrofábrica de chocolate.

La nave permitirá crear decenas de empleos en plena crisis y consolidará a la marca como un referente del sector a nivel nacional e internacional. Pese a que la operación se está llevando con total sigilo (desde Antiu Xixona y el Sepiva se han negado a hacer cualquier tipo de declaración por el momento), este diario ha tenido constancia de que las negociaciones se encuentran muy avanzadas e incluso esta semana se podría realizar la presentación oficial en la actual fábrica de la empresa, ubicada en el polígono Segorb. Si no surgen imprevistos de última hora en ninguna de las dos partes, Antiu Xixona y Sepiva sacarán a la luz las características del proyecto que convertirá la nueva fábrica en una de las mayores de España.

La mercantil cuenta con 12 líneas de producción que fabrican más de 60 variedades diferentes bajo las marcas Antiu Xixona, La Fama y Sanchís Mira, entre otras. A día de hoy posee dos plantas de producción en Xixona y dispone de tres centros logísticos en Madrid, Barcelona y Santander.

Ampliar mercado

Las intenciones de la firma de ampliar su mercado no son nuevas. Al parecer, en los últimos meses mantuvo negociaciones con una industria xixonenca que se encuentra en un concurso voluntario de acreedores. Sin embargo, la operación no llegó a buen puerto y finalmente se ha decantado por comprar las parcelas del polígono de El Espartal III, inaugurado hace tres años y con una actividad prácticamente nula a día de hoy.

En la actualidad sólo se está construyendo una nave allí y es la futura sede del Consejo Regulador de Jijona y Turrón de Alicante, que cuenta con tres subvenciones de la Diputación Provincial de Alicante y las Consellerias de Agricultura y Empresa. Esta falta de movimiento en la zona se debe a tres factores: la crisis, las restricciones crediticias de la banca y los retrasos que acumuló la urbanización del polígono.

El ex conseller de Empresa Justo Nieto inauguró esta zona industrial el 28 de diciembre de 2006, en pleno arranque preelectoral, junto al director general del Sepiva, Herminio García. Este último, a preguntas de los empresarios, manifestó que la construcción de las nuevas naves iba a comenzar en tres meses. Pero fue pasando el tiempo y el lugar quedó desierto.

La inactividad incluso motivó que los ladrones se fijaran en él para sustraer los cables de cobre de las farolas. No obstante, la Policía Local abortó el robo. Además, la zona se ha utilizado para realizar carreras de motocicletas y para patinar, entre otros.

Una firma con 147 años de experiencia

Antiu Xixona podría celebrar sus 150 años por todo lo alto. Si finalmente se cierra la adquisición de las parcelas -sólo falta la firma- y los proyectos de redacción y ejecución no sufren contratiempos, la empresa tendría el mejor cumpleaños posible. Dentro de tres años alcanzará los 150 años de vida y durante todo ese tiempo ha sido capaz de esquivar varias crisis -entre ellas la de los noventa, que hizo estragos en el sector-.

Antiu Xixona pertenece al grupo Sanchís Mira y fue fundada en 1863. En 1932 se constituyó como sociedad limitada y en 1989 se transformó en sociedad anónima. El origen de la empresa fue "netamente empresarial", según se recoge en su página web, y desde entonces su espíritu "ha sido siempre de constante evolución, implantando los más modernos sistemas de control y métodos de elaboración".