La comarca de l'Alacantí cierra los dos años de crisis económica sumida en una espiral de destrucción de empleo. Un total de 6.805 personas han pasado a ingresar la triste lista del paro desde diciembre de 2007, es decir, una media de nueve cada día.
Según los datos del Servicio Valenciano de Empleo (Servef), en el último año han perdido su trabajo 3.503 ciudadanos y en diciembre 404, la mayoría pertenecientes a los sectores de la construcción y servicios.
Por localidades y sin contar a la capital, San Vicente del Raspeig alcanza la cifra de 5.389 desempleados, mientras que El Campello supera por primera vez desde comienzos de siglo los dos mil, en concreto, 2.042.
Mutxamel y Sant Joan d'Alacant no le van a la zaga, con 1.853 y 1.738 parados, mientras que Xixona sufre las consecuencias del fin de la temporada del turrón, con 448 desempleados, 88 más que en noviembre, y Agost no levanta cabeza acuciada por los problemas en las cerámicas (443).
Las pequeñas poblaciones no se libran de esta lacra y La Torre de les Maçanes finaliza diciembre con 45 parados (11 más que en el mismo periodo de 2008), Aigües acaba con 57 (9 más) y Busot con 180 (57 más).
Especulación
Para el secretario de Comunicación y Formación de la Intercomarcal L'Alacantí-Les Marines, Salvador Roig, la crisis generada por un modelo económico que está basado "en la especulación inmobiliaria y la construcción, acompañado de la caída del consumo, está teniendo un impacto muy negativo sobre el empleo en la comarca".
En el computo anual, más de la mitad del paro acumulado lo soporta el sector servicios, con 6.871 desempleados, seguido de la construcción con 2.972 trabajadores e industria con 1.254.
Roig subrayó que en el colectivo sin empleo anterior se encuentran como solicitantes 937 personas, 270 más que en diciembre de 2008, lo que refleja "la situación de precariedad de las familias".
En este sentido, "y mientras la esperada reactivación económica no genere empleo, habrá que reforzar la protección de los trabajadores, es necesario atender a las personas desempleadas, las cuales van agotando sus prestaciones por desempleo".
Desde CC OO, "deseamos más que nadie que 2010 sea de verdad el año de la recuperación económica y el cambio de modelo productivo, si bien vemos como poco probable, que simultáneamente, dicha recuperación vaya asociada a la creación de empleo teniendo en cuenta el gran numero de puestos de trabajo destruidos en el ultimo periodo".
Por ello, "no se puede seguir con un modelo productivo capaz de crear empleo frágil y precario para más tarde destruirlo con la misma fragilidad", agregó.
