La vieja fábrica de El Almendro seguirá de momento en pie. Fuentes de Inmobiliaria Jijona S.A. (Inmojisa), la propietaria del inmueble, han anunciado el aplazamiento del derribo debido a la crisis económica que sacude el país. Las dificultades que vive el sector inmobiliario han sido las principales artífices de que la demolición se haya pospuesto "varios años", según las mismas fuentes. "Vale mucho dinero echar abajo el edificio y, hoy por hoy, no está en nuestros planes. Habrá que esperar algunos años", precisaron.

La inmobiliaria, no obstante, tiene ya en su mano la orden de derribo. La junta de gobierno del Ayuntamiento de Xixona aprobó concederle la autorización el 22 de octubre de 2007, pero de repente estalló la crisis. Y con ella, el cerrojazo de las entidades financieras y la desaceleración en la venta de viviendas. Todos estos factores hicieron que Inmojisa se planteara el derribo y hoy, más de dos años después, todavía es una incógnita cuándo caerá uno de los símbolos del municipio.

La fábrica de El Almendro se encuentra enclavada en una ubicación privilegiada, muy cerca del centro y dentro del casco urbano. Sus instalaciones se asientan en una superficie de 17.170 metros cuadrados y se empezaron a levantar en 1921, cuando el aumento de la producción obligó a ampliar la fábrica que El Almendro ya tenía en las proximidades.

Aún hoy también es una incógnita el número de viviendas que se levantarán en la zona una vez que se lleve a cabo la demolición. Apenas unos días después de que se supiera que la empresa iba a trasladar su producción a Toledo, en enero de 2006, también salió a la luz que Inmojisa tenía previsto construir allí 265 casas distribuidas en varios edificios de siete plantas.

No obstante, el proyecto no pudo salir adelante debido a la vinculación entre el ex concejal de Industria Francisco Doménech (PP) con la empresa promotora. El edil tuvo que abandonar el pleno extraordinario que se celebró el 31 de enero de 2006 por su relación familiar directa con los directivos de Inmojisa. La imposibilidad de que pudiera votar dejó sin mayoría al equipo de gobierno (PP-PCIX).

El futuro derribo pondrá fin a una historia de más de 100 años. En 1883 se fundó la primera fábrica y en 1905 nació la marca El Almendro. Con la crisis de los años 90 la marca fue adquirida por la multinacional Kraft Jacobs Suchard a la familia fundadora, Monerris Planelles, en 1992. Cuatro años más tarde Delaviuda adquirió El Almendro y se llevó la fabricación a Toledo durante cuatro años. En 2000 la producción volvió a Xixona, pero tras la Navidad de 2006 El Almendro se marchó para no volver.