Abandonar el ladrillo. El PSOE ha pedido al equipo de gobierno de El Campello cambios en el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) para limitar la dependencia de los ingresos procedentes de la construcción, una situación que ha imposibilitado poner freno al incremento del Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI) para 2010. El portavoz socialista Pepe Varó propuso a los populares en la comisión de Hacienda celebrada el pasado viernes modificar el PGOU para diversificar la economía local.

El documento, que está a la espera del visto bueno definitivo por parte de la Conselleria de Urbanismo, posibilita la construcción de hasta 30.000 nuevas viviendas, vincula las zonas comerciales al desarrollo de complejos residenciales y contempla una escasa superficie para suelo industrial. El PSOE lamenta esta previsión, basada en el modelo de hace tres años, cuando se elaboró el documento, que ha demostrado ahora graves inconvenientes para el bolsillo de los ciudadanos, al margen de posibles problemas hídricos, falta de servicios, sostenibilidad e impacto medioambiental. En cualquier caso, el cambio de modelo no supondría a corto plazo un freno para la escalada del IBI.

La falta de ingresos por licencias de obras y tasas urbanísticas, cuyas previsiones recaudatorias no sólo no se han cumplido en los dos últimos ejercicios sino que incluso han sido negativas, ha llevado a que las cuentas municipales para el próximo año contemplen un desfase de cuatro millones de euros entre gastos e ingresos. Ante esta situación el equipo de gobierno ha anunciado recortes en los gastos y que no puede rebajar el tipo impositivo del IBI, con lo que en 2010 habrá una subida media del 30% respecto al recibo de 2007, cuando se realizó la revisión catastral que está prorrateada en diez años.

Pepe Varó advierte al PP que "los tiempos de la construcción no volverán como antes. El alcalde no puede confiar en que cuando salgamos de la crisis se recupere el sector inmobiliario y se vuelva al ritmo de la construcción de antes. Esos ingresos ya no volverán a ser tan altos y hay que busca alternativas para poder seguir adelante. El PGOU es tremendamente ladrillero, no contempla nuevas fórmulas económicas y es un error. Necesitamos impulsar más zonas industriales y comerciales y diversificar, en lugar de fiarlo todo a la construcción. Se lo hemos dicho al alcalde pero nos ha dicho que no va a haber cambios".

El edil pone de ejemplo el PAI San Ramón, en la calle San Ramón, "que prevé viviendas donde ahora hay una gasolinera, un lavadero, una tienda de material de construcción, una carpintería. Necesitamos industrias no contaminantes que generen empleo y riqueza y la ampliación del polígono El Messell es totalmente insuficiente. Tenemos que aprovechar nuestras inmejorables comunicaciones con la autopista y la autovía y no limitarnos a ser una ciudad dormitorio".

Por otra lado Pepe Varó criticó la "salvaje subida" que va a volver a experimentar el IBI en 2010 e insistió en su propuesta al alcalde de rebajar hasta un 40% los sueldos de políticos y cargos de confianza, como primer paso para reducir los gastos de cara al próximos año. El alcalde había propuesto una bajada del 10%, algo que el PSOE considera totalmente insuficiente. Del mismo modo critica las previsiones irreales que ha realizado el Ayuntamiento en los últimos años sobre ingresos por el ladrillo y que pese a las advertencias de la oposición, no haya sido hasta ahora cuando el PP se haya decidido a recortar gastos.

Por otra parte la Gestora de Asociaciones de Vecinos convocará una reunión para el próximo mes para tomar medidas ante la subida del IBI para 2010.