Todos estarán presentes. Tanto el alcalde en funciones de El Campello como representantes de PSOE, Bloc y EU confirmaron ayer que acudirán a la protesta convocada por los vecinos para mañana en la planta de basuras de Les Canyades. La concentración, promovida por la Asociación de Vecinos Sector Norte de El Campello, se celebrará entre las 8.00 y las 14.00 horas a las puertas del vertedero, para denunciar los malos olores que genera el complejo por su deficiente funcionamiento y que padecen los vecinos de El Poblet de Cala d'Or y su entorno.

Para este acto reivindicativo se espera una gran participación y la edil de Medio Ambiente Elisabeth Basto anunció el pasado lunes que acudiría a la concentración para apoyar las reivindicaciones de los vecinos. Desde los grupos municipales de PSOE, Bloc y EU confirmaron ayer que también irán a la protesta, así como Juan José Berenguer, que ejerce de alcalde en funciones al estar Juan Ramón Varó de viaje hasta el lunes.

Desde Esquerra Unida señalaron que, además de su edil Erundina Gutiérrez, acudirán el diputado por Alicante en las Cortes Valencianas Lluís Torró y el responsable de ordenación del territorio del área comarcal de Medio Ambiente Miguel Ángel Pavón, quienes estarán en la zona sobre las 12.00 horas.

Los residentes de la zona norte ya se han manifestado en varias ocasiones por el mal funcionamiento de estas instalaciones, pero ésta es la primera ocasión en la que van a llevar sus protestas hasta las mismas puertas del vertedero. Cuentan con la autorización de la Subdelegación del Gobierno y esperan que sus reclamaciones sean por fin escuchadas y den soluciones a los malos olores.

Hay que recordar que existen sendas investigaciones abiertas por la Conselleria de Medio Ambiente y la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ), después de que un informe del Institut d'Ecologia Litoral a instancias del Ayuntamiento advirtiera de la existencia de vertidos de lixiviados en el entorno del complejo. El Consistorio dio parte de esta situación a la Conselleria mientras que EU pidió a la CHJ que investigara estos vertidos de aguas contaminadas.

Desde la planta se ha negado la existencia de estos vertidos, pese a que aún no cuentan con la depuradora de lixiviados, que está en construcción. Además, el Ayuntamiento ha encargado un estudio toxicométrico sobre la calidad del aire en la zona y otro sobre los olores, estando casi finalizado el primero mientras que el segundo se pondrá en marcha el próximo lunes.

Los vecinos insisten en que se cierre de forma cautelar la planta hasta que se aclare el origen de los olores y se solucione. Llevan desde mayo, cuando se puso en marcha el complejo, soportando desde las 22.00 a las 8.00 horas aproximadamente un hedor que califican de "insoportable", y que el propio alcalde ha podido comprobar y reconocer que es cierto.