La secretaria autonómica de Educación, Concha Gómez, insistió ayer en que atender en los institutos a los alumnos de tercero y cuarto de ESO con suspensos "es una medida muy beneficiosa para las familias, ya que les permite que sus hijos puedan tener clases de refuerzo sin necesidad de hacer gastos extraordinarios. Estamos aprovechando los recursos públicos ya existentes para ponerlos al servicio de las familias", dijo.

Además lo considera "beneficioso para las condiciones de trabajo del profesorado, a quienes se les permite obtener créditos de un modo nuevo y un complemento a los ingresos que tienen en julio en forma de sexenios".

Los representantes docentes contraatacan a las reflexiones de la representante de la conselleria apuntando que lo que debería hacer Font de Mora es reforzar y dotar los programas ya existentes de apoyo y refuerzo al alumnado con dificultades de aprendizaje "y no salir con ocurrencias fuera de tono cada vez que está en marcha una campaña electoral".