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or primera vez en la historia de la enseñanza en la Comunidad, la Conselleria de Educación acepta abrir el debate que puede cambiar el horario de los colegios. Lo piden los sindicatos y se negociará en abril. Para el conjunto de las formaciones sindicales es "todo un logro" iniciar conversaciones porque la Administración se había mostrado "especialmente hostil" hasta ahora, como subraya el STEPV.

La Comunidad Valenciana es una de las cuatro que no tiene regulada la jornada escolar junto a Aragón, Cataluña y el País Vasco. El resto han abierto la posibilidad de que los centros elijan horario lectivo desde el curso 1989-90 en el caso de Ceuta y Melilla hasta Navarra este mismo curso de modo experimental.

El conseller Alejandro Font de Mora se ha pronunciado esta semana en Alicante sobre el inicio de negociación "con los sectores sindicales y de padres" y precisó que para que la conselleria regule el procedimiento de la elección de horarios en los centros "deberá haber un importante grado de consenso, una absoluta claridad para que la mayoría se decante entre un sistema u otro, porque se puede incidir en la dinámica de la relación familiar y hay que tener mucho cuidado". Descarta cambios sin un respaldo mayoritario de los padres: "Sólo cuando tengamos una amplia panorámica plantearemos las soluciones oportunas", dijo.

Difícilmente el cambio de horario laboral que reivindica el 92% del profesorado de la Comunidad -según una encuesta del sindicato Fete-UGT- entrará en vigor el curso que viene. Font de Mora descarta plazos al respecto: "No tenemos calendario explícito, ni marcado. Se verá según la evolución de las circunstancias", contestó a este diario.

Mientras la totalidad de los sindicatos con representación en la enseñanza quiere que se ofrezca la posibilidad de elegir horario, en el sector de padres la unidad es igualmente absoluta pero en sentido opuesto: rechazan que sus hijos vayan a clase desde las 8.30 de la mañana a las 14.30.

La Federación de padres de centros públicos "Gabriel Miró" descarta razones pedagógicas o sociales que avalen la jornada continuada para los alumnos y añade que favorece una "privatización encubierta" porque para seguir en los centros a partir de las 14.30 h. habrá que pagar extraescolares y no todas las familias pueden. Tampoco la FAPA "Escuela y Familia", mayoritaria de la concertada, acepta "concentrar seguidas las horas de docencia para chavales tan jóvenes. Si cualquier adulto que trabaja de 8 de la mañana a 3 de la tarde acaba muerto, imagina los jóvenes".

El profesorado respalda por su parte un estudio comparativo del Instituto de la Calidad Educativa (ICE); de Galicia, tras cuatro años de jornada continua, que descarta diferencias significativas en el rendimiento del alumnado y afirma mejoras sociales y en el funcionamiento de los centros. En la Comunidad Valenciana todo está por decidir, el debate no ha hecho más que empezar.