La Jefatura Provincial de Tráfico de Alicante contabiliza ya más sanciones por conducir superando la tasa de alcohol permitida que por ir al volante sin el cinturón. Desde el 1 de julio de 2006 -cuando entró en vigor el carné por puntos- hasta el 31 de octubre de 2007 -últimos datos facilitados-, la Guardia Civil y las diferentes policías locales de la provincia han sorprendido a 3.168 conductores bebidos, mientras que las infracciones por no utilizar el cinturón o el casco ascienden a 3.908 en ese mismo periodo. Esta última cifra engloba las sanciones a conductores y motoristas, repartidas alrededor de un 50 por ciento para cada una, según los cálculos de la Guardia Civil de Tráfico. De ahí que, a día de hoy, se pongan más multas por conducir bajo los efectos del alcohol que por cualquier otra causa individualizada, según se desprende de los datos facilitados por el Gobierno en una respuesta parlamentaria.
En concreto, se contabilizan casi siete sanciones al día en la provincia por ir al volante en estado de embriaguez. Curiosamente, Alicante capital parece ser uno de los pocos municipios alicantinos en los que la situación es inversa. Es decir, que apenas hay alcoholemias positivas. Fuentes de la Policía Local que participan de forma activa en los controles que realiza el Cuerpo subrayaron ayer que la cifra de infractores por alcohol "ha caído bastante" en los últimos años. "Hace un par de semanas se montó un control y sólo se tramitó una sanción por alcohol en toda la noche", ejemplificaron.
Miedo
El motivo de tan baja cifra, al margen de la posible detracción de puntos, está en la gran cantidad de controles que realiza al año la Policía Local, según las mismas fuentes. Estos dispositivos "asustan" a infractores potenciales y provocan que no conduzcan si han bebido, tal y como detallan esas fuentes. "La gente tiene cada vez más cuidado. En 2007 hicimos 52 controles y este año haremos otros tantos. Es decir, que prácticamente todas las semanas te puedes encontrar con uno", agregan.
Desde la Policía Local de Alicante señalan además cómo es el conductor tipo que suele dar positivo en el test de alcoholemia. O bien se trata de "un joven que viene de fuera y no sabe que casi siempre hay controles en la ciudad", o bien "el típico chaval que vive en Alicante pero que siempre va pasado y no le importa coger el coche". No obstante, matizan que este último caso es cada vez más inusual.
